El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, anunció los resultados del conteo rápido y las estadísticas confirman que Andrés Manuel López Obrador logró movilizar alrededor de 15 millones de mexicanos a las urnas de su revocación. Confirma así que mantiene su histórico voto duro de cara a la sucesión de 2024.

Según las estadísticas del INE, la participación total en el proceso rondará entre el 17% y 18% del padrón. Queda así muy lejos del 40% que exige la ley para hacer vinculante la decisión, pero demuestra la capacidad de movilización del Presidente, que activó todo el dispositivo de la 4T para que sus seguidores participaran.

Los resultados respecto a la ratificación son los esperados: alrededor de un 90% de los participantes optaron por la continuidad del Presidente. Y alrededor del 7% pidió su remoción. En este último caso se trata de votantes -poco más de un millón de ciudadanos- que no hicieron caso al llamado de los líderes de oposición, quienes pedían no participar del proceso. 

Estos números son un alivio para Mario Delgado: durante todo el día en Morena circulaba un notable pesimismo. Se creía que apenas superaría los 10 millones de participantes. Con ese resultado, toda la línea narrativa preparada alrededor de este proceso quedaría enterrada. 

En su mañanera de lunes, AMLO podrá decir que los 15 millones de votos que sacó ayer para su ratificación, le alcanzarían para ganarle a Ricardo Anaya, segundo en los comicios de 2018. Y tendrá razón. La oposición argumentará que con todo el peso del estado a su favor apenas obtuvo la mitad de su votación de 2018, cuando recibió el apoyo de 30 millones de mexicanos. Y también tendrán razón.