El presidente municipal de Celaya, Juan Miguel Ramírez, reveló que el crimen organizado intentó apropiarse de su administración exigiéndole el control de varias dependencias en el inicio de su gestión. Esta declaración se dio durante una conferencia de prensa convocada tras el ataque armado contra el director del Instituto para la Formación Policial (Infopol), Jorge Acuña Dávalos, quien resultó ileso.

El ataque, perpetrado por al menos tres hombres, dejó el vehículo de Acuña destruido y su domicilio dañado por numerosos disparos, según informaron las autoridades.

A su vez el primer edil perteneciente al partido Morena, relató que las amenazas llegaron tanto de forma personal como mediante mensajes por diversas vías. Aunque no especificó qué dependencias estaban en la mira de los grupos criminales, aseguró que rechazó contundentemente sus exigencias.

"Nunca lo aceptaríamos ni lo aceptamos", enfatizó atribuyendo que estas presiones y ataques a su negativa de ceder el control de áreas estratégicas de la administración municipal.

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Ramírez, quien asumió el cargo en un contexto de violencia política tras el asesinato de Gisela Gaytán -la candidata original de Morena a la alcaldía-, ha enfrentado críticas por la asignación de vehículos blindados a titulares de ciertas dependencias desde el inicio de su mandato, lo cual justificó esta medida como una forma de proteger a funcionarios que enfrentan riesgos directos por su labor.

El atentado contra el director del Infopol es el episodio más reciente de una serie de ataques que han puesto a prueba la estabilidad en Celaya por lo que Ramírez anunció que, como respuesta, se reforzarán las medidas de seguridad en áreas clave, incluida la protección del propio Acuña, quien ya cuenta con nuevas medidas para garantizar su integridad.

Asimismo, reiteró su compromiso de continuar trabajando pese a las amenazas. "Tengo miedo, como todos los ciudadanos, pero seguimos con nuestra labor", declaró.