El secretario de Obras Públicas de San Nicolás, Rubén López Lara, íntimo del círculo de su ex jefe, Zeferino Salgado, fue señalado por beneficiarse de los contratos de pavimentación por 46.5 millones de pesos otorgados al Bufete de Ingenieros Constructores AG y a Proyectos, Asesoría y Control de Calidad de Obras Civiles y otras empresas ligadas a él.

Salgado es considerado el principal aliado de Marko Cortés en Nuevo León, y jefe del Grupo San Nicolás, uno de los más panistas del país. Además, dado el legado de la alcaldía entre él y su hermano Pedro Salgado en 2009, se trata de un aliado clave para el gobernador y los diputados locales que lo acompañan en proyectos de leyes e iniciativas.

En estas empresas figura Pablo Francisco Anaya López como socio del funcionario en Servicios Administrativos y Constructivos del Noreste que, según el acta constitutiva, fue creada en junio del 2011 y no ha tenido movimientos desde entonces.

Este bufete fue creado apenas cuatro meses antes de que López asumiera su cargo en octubre del 2015 con la administración del actual senador Víctor Fuentes, un mes después la empresa Paccocsa obtuvo un contrato por 7.3 millones de pesos para bacheo, en 2019 el Bufete de Ingenieros Constructores AG recibió dos contratos por rehabilitación de pavimento asfáltico por casi 21.1 millones de pesos y otro por cerca de 18,2 bajo la supervisión de esta secretaría.

No es la primera vez que los hermanos Salgado son señalados, aunque nunca procesados, por actividades sospechosas pues en 2017 fueron exhibidos en los Paradise Papers por sus relaciones con un grupo de accionistas de empresas fantasma a cargo de la compraventa de terrenos, propiedades e incluso contratos con Pemex.