El respaldo de la 4T a Samuel García en las últimas horas, combinado con la visita del secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández al domicilio del gobernador en Chipinque, acelera la tesis en Palacio Nacional de que García será el candidato a presidente de MC por fuera de la alianza opositora.

Tal como reveló LPO, este es el escenario que Andrés Manuel López Obrador persigue, o sea, que la oposición tenga dos candidatos a presidente.

Desde Gobernación se ha hecho un esfuerzo absoluto para evitar una consonancia entre García, PRI y PAN y de momento ese esquema de sostiene. Esta es una diferencia vital con Luis Donaldo Colosio: el alcalde regio quiere ser candidato por una super alianza opositora que Dante Delgado rechaza y donde no aparecen demasiadas opciones por fuera del gobernador de NL.

Esta interacción entre la 4T y Samuel atraviesa diversos factores como los apoyos a la entidad ante una posible crisis hídrica, respaldo en materia de infraestructura y, ahora, la definición del affaire Telsa, donde la 4T empezó a jugar para que la planta se instale en una entidad gobernada por Morena. Sería un elemento determinante si Marcelo Ebrard desiste de su cabildeo con la compañía de Austin.

Al gobernador la posibilidad de ser candidato le agrada, cree que tendrá buena reacción en su electorado y reitera como un mantra que siempre ha iniciado las contiendas electorales en una posición marginal y que finalmente se ha impuesto. Así sucedio con el Senado en 2018 y con la gubernatura en 2021.

En contrapunto, en el entorno del gobernador inquietan los aspectos de su seguridad personal en una eventual campaña, factor que no es menor al momento de definir el rumbo de acción.

Los límites a esta ambición aparecen en el círculo rojo estatal donde no termina de convencer su salida para buscar la presidencia. El poder económico pretende que el gobernador cumpla su sexenio entero, esto porque además hay una convicción dominante de que el año que viene no vale la pena enfrentar a Morena.