Luego de la presión ejercida por senadores republicanos para declarar a los cárteles mexicanos como "organizaciones terroristas", el gobierno del presidente Joe Biden dio un pasó más en su combate contra las drogas que se venden desde México y consideró "al tráfico de drogas, especialmente las sintéticas" como una "amenaza" a su seguridad nacional.

En su nueva evaluación anual de amenazas, realizada por la comunidad norteamericana de inteligencia, Washington colocó al tráfico de fentanilo a la par de las amenazas que representan, por ejemplo, Rusia, China y Corea del Norte. "La amenaza de las drogas ilícitas se encuentra en niveles históricos, con más de 100 mil muertos por sobredosis al año por primera vez en la historia", sostiene el informe elaborado por el Buró Federal de Investigaciones y la Central de Inteligencia Internacional (CIA), entre otros organismos.

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"Las organizaciones criminales trasnacionales de México son las productoras y proveedoras principales de drogas ilícitas en Estados Unidos", considera el estudio que afirma que antes los cárteles importaban fentanilo desde China y que ahora, debido a su expansión, lo producen en México a partir de la compra que hacen de precursores del país asiático.

Además, el informe detalla que "las agencias de Estados Unidos están decomisando cada vez más cantidades más grandes de fentanilo" y que "la mayoría de las 100 mil muertes anuales por sobredosis en Estados Unidos se deben a esta droga". Durante el último tiempo, distintas autoridades norteamericanas han calificado como una "epidemia sanitaria" a las consecuencias que produce esta droga sintética en el país vecino.

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La divulgación del informe se da en momentos en los que la relación bilateral no pasa por su mejor momento a raíz del tráfico de drogas y el secuestro de cuatro ciudadanos norteamericanos en Tamaulipas, de los cuales dos fueron asesinados en un crimen adjudicado al Cártel del Golfo. Durante los últimos días, diferentes diputados republicanos, como Dan Crenshaw, exigieron declarar a los cárteles como "organizaciones terroristas" y utilizar al ejército norteamericano para combatirlos. "Pare de defender a sus amiguitos narcos y tome acción para prevenir el tráfico de fentanilo", le dijo al presidente Andrés Manuel López Obrador.

A pesar de los cruces, el canciller mexicano Marcelo Ebrard aseguró, luego de reunirse con una delegación de la Casa Blanca, que "no hay tensión" con Washington porque estas posturas son de figuras legislativas de la oposición y no del gobierno que encabeza Biden. Este lunes, Ebrard mantendrá una serie de reuniones con cónsules mexicanos para desarrollar una campaña de concientización sobre la lucha que el país lleva a cabo en contra de esta droga sintética.