La situación sanitaria de Paraguay es dramática. Aumento exponencial de contagios, hospitales colapsados, el 33 por ciento de los trabajadores de la salud enfermos y casos de corrupción en la compra de insumos para la pandemia que forzó la salida de casi la mitad del gabinete.

Además, en las últimas horas se conoció que una planta de oxigeno que le costó al estado paraguayo 4 mil millones de dólares para instalarse en el Hospital Nacional de Itauguá tiene la obra parada.

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En un contexto de urgencias que se acumulan, la prioridad pasar por la provisión de vacunas. El gobierno de Abdo Benítez recibió un primer lote de Sputnik, luego de un insólito error que demoró la llegada de las dosis del sistema Covax, mientras espera 2 millones de la india Covaxin que le permita acercarse a la dicil meta de inmunizar al menos al 30 por ciento de la población.

En el medio de la necesidad, apareció un ofrecimiento de China que abrió un encendido debate dentro del sistema político paraguayo, ya que, Paraguay es uno de los 15 países del mundo que no reconoce al gigante asiático y tiene vínculos diplomáticos con Taiwan.

El gobierno de Abdo Benítez es uno de los quince en el mundo que no tiene relaciones con China y reconoce a Taiwan.

Honduras, Nicaragua, Guatemala, Nauru, San Vicente y Granadinas, son algunos de los países que comparten la postura paraguaya. Esta situación hace que el Mercosur no pueda firmar un acuerdo de libre comercio con la potencia asiática.

En ese sentido, la Cámara de Diputados rechazó una propuesta de la oposición para instar al Ejecutivo a establecer relaciones diplomáticas y consulares con China y, de esa forma aprovechar sus vacunas. La propuesta del Partido Liberal no prosperó debido a la mayoría de escaños del gobernante Partido Colorado quien se mantiene firme en defensa de la histórica posición.

La diputada liberal Celeste Amarilla insistió en el debate, no solo de un acuerdo que incluyera vacunas sino también en el poderío económico de China y las ventajas que acarrearía para Paraguay penetrar en ese mercado con sus exportaciones de carne.

El presidente chino Xi Jinping

AP

"Que nos compre un solo renglón de nuestra economía como la carne, va a significar un antes y un después; toda la producción paraguaya no cubre las necesidades de una provincia", dijo Amarilla, citada en un comunicado de la Cámara de Diputados que también planteó que "la economía de mayor crecimiento a nivel mundial en las últimas décadas y es considerada como la locomotora de gran parte de la economía internacional".

Por su parte, los diputados del Partido Colorado defendieron en la sesión la alianza histórica con Taiwán y su solidaridad con Paraguay, en relación a los proyectos de cooperación de la isla en el país suramericano. "Si hay un pueblo generoso y solidario y comprometido con el Paraguay, ese es la República de China (Taiwán); la solidaridad no se cuantifica, se agradece", enfatizó el diputado oficialista Walter Harms.

La geopolítica de la vacunación

El año pasado el Senado rechazó un proyecto de declaración propuesto por el Frente Guazú de Fernando Lugo para instar al Gobierno de Mario Abdo Benítez a un acercamiento político con China a cambio de ayuda sanitaria en la lucha contra la covod-19. Sin embargo, el gobierno de Lugo tampoco fue modificado.

Como potencia mundial, China utiliza su vacuna como herramienta diplomática y ante las fallas de AstraZeneca y las aparentes condiciones inaceptables de Pfizer, logró hacerse fuerte en América Latina junto con la Sputnik. Chile y Uruguay están vacunando masivamente con la Sinovac al igual que Brasil y Argentina está aplicando la Sinopharm.

Por eso, la pandemia significó una oportunidad para retomar el debate sobre la relación en el país guaraní que sigue preservando una postura diplomática que se sostiene desde la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989) en el contexto de la Guerra Fría.

China utiliza su vacuna como herramienta diplomática y ante las fallas de Astrazaeneca y las aparentes condiciones inaceptables de Pfizer, logró hacerse fuerte en América Latina junto con la Sputnik.

Taiwán es consciente de esto y acusó a China de usar sus vacunas para presionar a Paraguay a romper relaciones pero el margen para compensar a su poderoso rival regional es bastante acotado.

El ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, Joseph Wu, dijo que China había empleado las vacunas como una forma de presión. "El Gobierno chino ha sido muy activo al decir en público que si el gobierno de Paraguay está dispuesto a cortar los lazos con Taiwán, obtendrán algunos millones de dosis de vacunas de China", dijo Wu.

En el fondo del debate también existe un calculo geopolítico para equilibrar la incidencia de China en la región y para ese fin, Paraguay es clave. Estados Unidos está juntando a sus aliados del pacífico Japón, India, Australia y Taiwan para empezar a penetrar a través el poder farmacéutico del laboratorio indio Bharat Biotechy su Covaxin, recientemente autorizado por el gobierno paraguayo.

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De esta forma, el gobierno paraguayo se reparte entre ser un laboratorio geopolítico para contrarrestar el poder de China y la urgencia para conseguir vacunas en un contexto en el cual en hospitales regionales denunciaron que están abarrotadas y tiene que atender a los pacientes en los sillones de los pasillos por falta de camas y el 50 por ciento de los contagiados ya son menores de 50 años.

Estados Unidos está juntando a sus aliados del pacífico Japón, India, Australia y Taiwan para empezar a penetrar a través el poder farmacéutico del laboratorio indio Bharat Biotechy su Covaxin, recientemente autorizado por el gobierno paraguayo.

Ante esto, el Ministerio de Salud plantea retroceder a una cuarentena total si no se controla el nivel de casos y superen los 14.000 contagios semanales. Como medida de mitigación, planea implementar el Operativo Serrucho, con medidas restrictivas fuertes con base en las ciudades que están dentro de un mapa de riesgo de Covid-19.

"Estamos entrando en una fase de la gestión de la pandemia, donde vamos a tomar medidas tipo serrucho, tipo grifo: Vamos a cerrar medidas restrictivas fuertes, como de shock, como hicimos durante la Semana Santa, y vamos a disminuir las restricciones como vamos a tener en esta semana", explicó a medios locales el doctor Guillermo Sequera, director de Vigilancia Sanitaria.

La velocidad del virus y sus consecuencias sanitarias, sociales y económicas ameritan respuestas rápidas y pragmatismo que por el momento, el gobierno de Abdo ha decidido postergar.