De cara a la elección de junio Morena se ha convertido en una maquinaria electoral cuyo único propósito parece ser el asegurar las candidaturas que permitan obtener victorias contundentes, con figuras que permitan asegurar la mayoría en el legislativo federal.

Esa estrategia de pragmatismo que toca instrumentar a Mario Delgado, no repara en los principios del partido ni en sus propios estatutos y puede terminar por alienar a las bases morenistas en algunos estados y perjudicar las estructuras partidarias.

En diversas entidades se están eligiendo -o imponiendo-- figuras provenientes de cualquier partido y dudosa reputación. Poco parece importar que el artículo sexto bis de los estatutos establezcan que "la trayectoria, los atributos ético políticos y la antigüedad en la lucha por causas sociales serán vinculantes y valorados para quien aspire a ser candidato a un cargo interno o de elección popular".

En Guanajuato, donde los diputados Luis Antonio Magdaleno y Jessica Cabal se fueron del PAN por no conseguir las candidaturas a la presidencia municipal de Acámbaro y Abasolo, llegaron a Morena hace una semana esperando una oferta electoral. Son férreos opositores a la despenalización del aborto y siempre se caracterizaron por oponerse a las políticas federales, especialmente en los temas energéticos y de seguridad.

En Quintana Roo se postuló Raymundo King de la Rosa para ser candidato a la presidencia municipal de Othón P. Blanco, y que es acusado de ser un incondicional del exgobernador priísta Roberto Borge, preso por corrupción.

En el norte del país está el caso de la candidata al gobierno en Nuevo León, Clara Luz Flores, de pasado tricolor, quien ha sido calificada como una traición del partido a la organización de las bases en la entidad norteña, debido a que militaba en el PRI hasta febrero de 2020.

A la alcaldía de Monterrey se postuló Víctor Fuentes, quien como senador se declaró admirador de Felipe Calderón y lo enalteció porque "gracias su gobierno, México no tiene a tantos mexicanos viviendo en Miami como los venezolanos a causa de los bolivarianos".

La militancia potosina también se enardeció después de que Mario Delgado anunciara a Mónica Rangel, secretaria de Salud del gobierno priista de Juan Manuel Carreras, y señalada por varios casos de corrupción, como candidata a gobernadora de esta entidad.

Uno de los casos más escandalosos es sin duda el de Xavier Nava, también en San Luis. Después de fracasar en su intento por ser candidato a gobernador por el PAN, el edil de la capital con licencia decidió buscar la reelección inmediata a través de ese partido que parece haberse convertido en una mera franquicia color guinda.

La trayectoria de Nava, que utiliza el nombre de su abuelo a conveniencia, es la del típico saltimbanqui de la política. Primero fue diputado federal por el PRD, después alcalde de SLP por el PAN, y desde hace una semana busca participar bajo las siglas de Morena.

Hasta hace poco era el gran aliado de la corrupta familia Gallardo -uno de sus miembros acusado por el desvío de 700 millones de pesos--, pero hoy se presenta como el único que puede apartar al estado de su perversa influencia.

Lo sorprendente es que el 14 de febrero, cuando todavía faltaban 11 horas para cerrar la inscripción de precandidatos, y habiendo 16 inscritos, Delgado salió a darle un inequívoco espaldarazo al panista, todavía precandidato por su otro partido, el de Fox y Calderón.

En el video podemos ver como Delgado le dice a Nava: "queremos que te reelijas". Algo que parece una evidente muestra de favoritismo, un acto anticipado de campaña y una burla a la institucionalidad del partido

Lo increíble es que si alguien representa el maridaje entre el poder económico y el poder político en San Luis Potosí es Xavier Nava. Su candidatura se impulsó a pesar de ser acusado de avalar la depredación de la Sierra de San Miguelito para negocios inmobiliarios. Nava ha sido acusado también de usar operativos anti alcohol como caja chica para sumar más de cinco millones de pesos al erario.

Se lo responsabiliza también de haber contratado una playmate venezolana como responsable del área de imagen institucional con uno de los salarios más altos de la administración municipal y de aumentar el presupuesto de comunicación social del ayuntamiento de 37 a 100 millones de pesos para proyectar su imagen personal, según Juan Carlos Ruiz Guadalajara.

En la revisión de la cuenta pública municipal de 2019, el monto de los pliegos de observaciones supera los 29 millones de pesos y se presume un probable perjuicio a la Hacienda Pública por más de 19 millones.

Lo que más llama la atención es que durante los últimos tres años Nava ha sido un férreo opositor de la 4T. En los primeros meses de gobierno firmó aquel famoso desplegado del grupo #YoSiQuieroContrapesos, junto a Javier Corral. En octubre de 2019 acudió junto a otros ediles a las afueras de Palacio Nacional, en una manifestación violenta que fue a pedir al presidente regresar el presupuesto del Fondo de Seguridad y Obra Pública. En enero de 2020 se unió a una marcha convocada por Javier Sicilia y Julián LeBarón en Cuernavaca a la que asistieron varios opositores, y en agosto de 2020 estuvo en una reunión con los gobernadores de la Alianza Federalista.

Por si eso fuera poco, hay notas de la prensa que dan a conocer que en mayo de 2019 personas allegadas a su administración se encargaron de movilizar a militantes panistas para protestar en contra del gobierno de AMLO, y que en julio del año pasado ofreció vales de gasolina para participar en las protestas de FRENA contra AMLO. En una entrevista reciente que hice al alcalde con licencia se comprometió a mostrar en redes sociales un histórico de los gastos en este rubro a fin de comprobar si esto era o no verdad. Hasta el momento de publicar esta nota no lo había hecho.

Naturalmente, Nava no tiene ningún mensaje para la militancia morenista. Ningún argumento para convencerla o entusiasmarla. Un partido que perdió dos largos años en conflictos intestinos hoy no parece tener otra alternativa que entregarse a los mercenarios de la política o dejar su suerte a los caciques locales.