Bien dicen que quien no encuentra oportunidades, las crea. Esto ha hecho el exgobernador Jaime Bonilla, el cual desde la llegada del presidente López Obrador a Tijuana este miércoles acercó a un grupo de sus operadores que descendieron de un autobús y se identificaron como taxistas del municipio quienes acusaron a la administración de Marina del Pilar de "panista".

Esta mañana, afuera de la Zona Militar No. 2 ubicada en la Colonia Morelos, donde tuvo lugar la conferencia de prensa mañanera, los mismos grupos se concentraron a las puertas del lugar. Revueltos con simpatizantes morenistas y miembros de la comunidad LGBT que agradecieron al presidente los cambios legales y programas sociales de la 4T, varios manifestantes expresaron su insatisfacción.

Como pudo documentarse ampliamente, al menos dos conocidas operadoras de Bonilla Valdez dirigieron los ataques contra Marina del Pilar, quien pertenece a un grupo morenista distinto al del exgobernador. Se trata de la ex secretaria estatal Vicenta Espinosa y de María del Carmen "Meli" Espinoza, ex síndico procuradora de Tijuana. Además del abogado Humberto Valdez, un tertuliano de la cadena de televisión de Bonilla, PSN (Primer Sistema de Noticias). Los tres han manifestado incluso en público su rechazo a la actual administración en BC.

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Según pudo saber LPO, los ataques del bonillismo al Gobierno de Baja California apuntan al respaldo de la gobernadora a la dirigencia estatal de Morena, cuyo presidente es César Castro Ponce. Con esto el jefe político de Espinosa y Espinoza buscaría remover del cargo a quien tiene la responsabilidad del partido, mientras desplaza también la operación de Ismael Burgueño, y busca a su vez embarcarse al Gabinete Presidencial pese al escándalo del homicidio de la periodista Lourdes Maldonado que lo acusó de amenazas de muerte.

"El gobierno del estado en BC está secuestrado por la nefasta derecha y el corrupto neoliberalismo", escribió Vicenta Espinosa en un mensaje que difundió por WhatsApp. Burgueño Ruiz, de acuerdo con el bonillismo, ha entregado las decisiones del partido marrón al PAN a través del esposo de la gobernadora Marina del Pilar, Carlos Torres Torres, un histórico miembro de la cantera panista.

Lo anterior contrasta con el respaldo que ha dado cada que ha tenido oportunidad el presidente López Obrador a la gobernadora Marina del Pilar, quien ratificó a Burgueño en la dirigencia de Morena, pese a la inestabilidad del partido ante la división creada por Jaime Bonilla ante la postulación de la mexicalense a la gubernatura en junio de 2021.