Enrique Alfaro tiene una sensación ambivalente respecto al tramo final de la contienda presidencial en Jalisco. Por un lado, observa en una encuesta que recibió en las últimas horas que Jorge Álvarez Máynez, candidato presidencial al que rechazó desde el inicio, ya está en segundo lugar en la entidad que gobierno. Por otro lado, entiende que necesita que esa tendencia se consolide para que su candidata se imponga en una elección muy disputada en Guadalajara.
Según pudo conocer el gobernador, el aspirante presidencial de MC ya ronda el 22% de los votos por sobre el Frente que ronda lel 19%.
Alfaro estuvo muy cerca de Xóchitl Gálvez, a quien conoce desde antes de la campaña presidencial y a quien le recomendaba que eligiera perfiles panistas para contender por la gubernatura contra Pablo Lemus y dejar a Morena en tercer lugar.
En paralelo, Alfaro siempre chocó contra Máynez y nunca se mostró comprometido con su candidatura, por la cual criticó a Dante Delgado.
Sin embargo, luego de que el PRI acordó que el candidato en la CDMX fuera del PAN, la ficha de cambio fue que el tricolor designaba candidata en Jalisco y de allí la nominación de Laura Haro, dirigente estatal del PRI, muy allegada a Alejandro Moreno Cárdenas y distante al grupo de Alfaro.
El gobernador cree que Haro va a terminar en tercer lugar y que esa debacle tiene por consecuencia el tercer lugar de Xóchitl en Jalisco.
En el PRI, por otra parte, creen que Alfaro acordó con el Gobierno Federal para no apoyar a Xóchitl y así evitar contratiempos cuando abandone Casa Jalisco y quiera dedicarse a sus negocios deportivos.
El resultado de Máynez también es un golpe a la aspiración de Alfaro de tomar el control de MC y desplazar a Dante Delgado.
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