A semanas de las elecciones en España, el mundo económico ya hace sus apuestas y Carlos Slim ya mueve sus fichas. Es a través de su socio Isidro Fainé que ya realiza acercamientos con Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular (PP).

Fainé es dueño de Caixa, banco en el cual el magnate mexicano también tiene una participación accionaria a través de banco Inbursa y en los últimos días ha sido el puente entre el político que aspira a la presidencia española y Slim.

El dueño de Grupo Carso entiende las posibilidades de triunfo de Feijóo y, además, que de ganar la presidencia habría un giro económico con mayor apertura de inversión extranjeras en empresas españolas, algo que ha estado francamente limitado con el gobierno de Pedro Sánchez.

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El interés de Slim en España no es menor, donde tiene varios negocios como la compañía Realia Busines, que desarrolla e invierte en inmuebles de corte comercial, también es accionista mayoritario de Fomento de Construcciones y Contratas (FFC) y, como ya se mencionó, desde 2016 Carlos Slim tiene acciones en CaixaBank, grupo financiero al que también impulsó para entrar a la compra de Banamex.

El empresario también entró en otros negocios, como en el deportivo, al volverse accionista mayoritario del Real Oviedo de España, club al que entró con una inversión de dos millones de euros en acciones y se volvió en su salvador, ante las fuertes presiones financieras que atravesaba al equipo de futbol, pero que vendió el año pasado.