Para quedarse en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O tuvo una condición a Claudia Sheinbaum: tomar el control financiero de Petróleos Mexicanos (Pemex).

En medio del nerviosismo en los mercados financieros, el funcionario confirmó a inversionistas su permanencia "por tiempo indefinido" en la dependencia, sin embargo, esta decisión lo tomó bajo la condición de poder poner a una persona de su entera confianza en la dirección financiera de la petrolera, de acuerdo con fuentes en diálogo con LPO. 

En el entorno de Claudia Sheinbaum hay coincidencia en que el próximo director de la petrolera deberá ser un perfil más financiero que petrolero, a fin de poder reducir la abultada carga fiscal y encaminar el modelo de negocios, que durante el sexenio de AMLO fue duramente castigado por las agencias calificadoras, hasta el punto de quitarle el grado crediticio. 

Ramírez de la O intentó calmar a los mercados en una llamada accidentada

Bajo este contexto, Ramírez de la O seañala que el perfil de la dirección de finanzas también será clave y debe estar alienado con Hacienda. Busca así evitar episodios de tensión entre la petrolera y la dependencia, tal como pasó con Octavio Romero Oropeza.

Durante este sexenio, Hacienda mantuvo el apoyo a la petrolera a través de transferencias y reducción en su carga fiscal, aunque para el último tramo hubo algunos puntos de tensión entre la dependencia y la petrolera, pues Ramírez de la O buscaba que Pemex encarara más refinanciamientos de deuda.

Vale recordar que la petrolera actualmente tiene un adeudo total que supera los 100 mil millones de dólares y para el próximo año tiene pendientes vencimientos por alrededor de los 7 mil millones, los cuales tendrá que asumir la futura administración. Además, la estrategia nunca fue funcional para poder aumentar la producción petrolera.