Una menor inflación -a la estimada por el mercado- en Estados Unidos contribuyó a que la divisa mexicana aumentara su fortaleza al arranque de la jornada de este miércoles, registrando una apreciación de 1.2% frente al dólar.

Esta mañana se dio a conocer que la tasa anual inflacionaria en Estados Unidos durante julio se ubicó en 8.5%, contratando con el 9.1% obtenido un mes antes. En el comparativo mensual se ubicó en 0.0%, datos por debajo de la expectativa del consenso, lo que puede mandar señales de un cambio de tendencia.

El hecho de que la inflación no hubiera mostrado ninguna variación mensual se entiende principalmente a una caía den el precio de las gasolinas en las estaciones -una caída mensual de 7.7%-sin embargo, aún sigue siendo foco de preocupación pues sigue en niveles altos.

En este contexto, los mercados reaccionaron de manera inmediata ante el dato de inflación, pues si bien las presiones por la inflación no desaparecen y se espera que la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) mantenga una ruta al alza en las tasas de interés, la magnitud de estos movimientos pudiera ser menores.

Así, el tipo de cambio se ubicó esta mañana en 20.2 pesos por dólar, de acuerdo con datos de Banco de México, tocando un mínimo de 19.99 unidades y un máximo de 20.2833 frente al billete verde.

Se prevé que la divisa mexicana también pueda enfrentar movimientos ante la decisión que anunciará el día de mañana el banco central mexicano sobre política monetaria. Hasta el momento el mercado ya descuenta un alza en la tasa de 75 puntos base, con lo que la ubicaría en 8.5%. Un elemento central al que responderá el mercado, en caso de que no haya sorpresas en esta decisión, será el tono del comunicado.