Tras meses de diálogo, el gobierno de la 4T presentó este lunes un acuerdo con empresarios para ampliar el plan anti-inflacionario, contemplando un tope al precio de la canasta básica de 1,039 pesos, que representa una reducción del 8%, que es casi el nivel de alza inflacionaria que atraviesa el país.

Si bien en mayo se presentó un primer plan anti-inflacionario, el equipo de Rogelio Ramírez de la O en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ya reconocían la dificultad para incidir realmente en el aumento en precios a alimentos, que es el que más presiones está generando en la inflación general, para muestra, el funcionario explicó esta mañana que los energéticos crecieron en el último registro en 0.62 puntos porcentuales; mientras que los alimentos en 4.2%.

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"Tenemos poca inflación en energéticos, pero en alimentos, aunque no ha sido mucho el incremento, sí nos está afectando. Nos está llevando a que se pierda poder adquisitivo en las familias, en la economía popular. Y todos sabemos que es muy importante controlar la inflación porque todos sabemos que nos afecta mucho", dijo por su parte Andrés Manuel López Obrador.

Con las nuevas medidas acordadas, presentadas durante la conferencia matutina de este día, se prevé que impliquen una reducción de 8% en el precio máximo acordado anteriormente para la canasta básica. Es decir, pasaría de 1,129 a 1,039 pesos, de aquí a febrero de 2023.

Este plan contempla que las empresas asumieron el compromiso de no subir los precios durante la vigencia del acuerdo, el cual incluye particularmente al rubro de maíz, pollo y huevo; en tanto que el gobierno asumió una serie de compromisos como otorgar una licencia única universal para actividades de importación, distribución de alimentos e insumo para el embace de alimentos.

Esto implica que estarán exentas de trámites y permisos incluyendo sanidad y calidad, así como verificaciones, aranceles y otros requisitos para la circulación nacional de dichos productos y se fortalecerá la producción de granos en los que seamos deficitarios y cancelará exportación de maíz blanco, sardina y frijol.

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Esta ampliación del plan para combatir la inflación implicó el acuerdo con 15 empresas, como las atuneras Tuny y Dolores, Grupo Gruma y Maseca, Misna, Bachoco, Huevos San Juan, Sukarne, Grupo Gusi, Opormex, Sigma alimentos, Walmart, Soriana, Chedraui, Calvario y Valle Verde.

Vale recordar que durante la primera quincena de septiembre el Índice de Precios al Consumidor mostró un incremento anual de 8.7%, preocupando que a su interior, no se obeservaron señales de haber tocado un techo, como algunos expertos preveían, por lo que volvieron a subirse las expectativas para la inflación al cierre de año, lo mismo que para 2023. En ese contexto, Banxico ha llevado la tasa de interés a un nivel histórico de 9.25%.