El informe de pobreza multidimensional que presentó este miércoles el INEGI no solo muestra que 38.5 millones de personas viven en esa condición, sino que se responde a la pregunta ¿Dónde están?. Y el mapa refleja contrastes muy marcados.

En promedio, el 29.6 % de la población del país vive en pobreza multidimensional. Esto significa que tres de cada diez mexicanos tiene ingresos insuficientes para cubrir la canasta básica alimentaria y no alimentaria, y además sufre al menos una carencia social: rezago educativo, falta de acceso a servicios de salud, seguridad social, vivienda adecuada, servicios básicos o alimentación nutritiva.

Pero ese promedio nacional esconde realidades muy distintas. En los tres estados con los niveles más altos -Chiapas, Guerrero y Oaxaca-, las cifras son el doble o incluso más: 66%, 58.1 % y 51.6 %, respectivamente. En el otro extremo, Baja California, Baja California Sur y Nuevo León registran menos del 11%.

Elaboración propia en base a INEGI

Cuando se mira en términos absolutos, la fotografía cambia. El Estado de México no tiene los porcentajes más altos -su nivel está por debajo del promedio-, pero concentra la mayor cantidad de personas en situación de pobreza: más de 5 millones de habitantes. Esto se explica por su tamaño poblacional: al ser la entidad más poblada del país, incluso un porcentaje menor se traduce en millones de personas afectadas.

Acceso a salud y seguridad social: los pendientes del último sexenio

La pobreza extrema,  cuando los ingresos no alcanzan ni para la canasta alimentaria y se tienen tres o más carencias sociales, presenta una distribución igualmente desigual. El promedio nacional es de 5.3 %, equivalente a 7 millones de personas. Sin embargo, en Chiapas llega a 27.1%, en Guerrero a 21.3% y en Oaxaca a 16.3%. Estas tres entidades también lideran en números absolutos, mostrando la concentración de los casos más graves.