La disminución de tensiones inflacionarias, altas tasas de interés y menores riesgos financieros sobre México dieron empuje al peso mexicano durante esta semana, tiempo en que la divisa acumuló una apreciación respecto al dólar de 2%, manteniéndose por debajo de las 19 unidades por dólar.
Durante esta jornada de viernes el tipo de cambio cerró en 18.77%, que es una apreciación de 0.41% respecto al cierre de la jornada anterior, a pesar de que arrancó con tambaleos ante un ligero fortalecimiento del dólar, sin embargo, a lo largo del dÃa volvió a recuperar su fortaleza.
Esta semana en particular fue significativa porque el peso rompió, por primera vez desde febrero de 2020, la barrera de las 19 unidades por dólar, sorprendiendo a los especialistas que ahora tienen una mejor perspectiva para el cierre de año. Por ejemplo, la expectativa de Citibanamex es que el año cierre en 20.40 pesos por dólar, por debajo de las 20.50 unidades que estimaban dÃas atrás.
El peso sigue apreciándose y AMLO lo atribuye a la confianza de inversionistas en México
Esta semana, en particular, el mercado reaccionó ante una disminución en su perspectiva de riesgos ante señales a la baja en la inflación por menores precios en las materias primas y una tasa anual inflacionaria en Estados Unidos a la baja. Por otro lado, la reacción también se dio en el marco del cierre de la Cumbre de lÃderes de América del Norte.
Se trata de hechos inmediatos que se suman a factores más estructurales que han influido en que el peso haya resistido las tensiones globales. Por ejemplo, la disciplina fiscal del gobierno de la 4T que ha sido reconocida por las agencias crediticias, la estabilidad polÃtica en medio de un contexto regional adverso.
Pero sobre todo también el diferencial de tasas entre Banxico y su homólogo estadounidense (Fed, por sus siglas en inglés) que ha incrementado la demanda de pesos. También ante la expectativa de que el banco central mexicano mantendrá una postura restrictiva todo este año.
Con todo eso, en las primeras semanas del 2023 la divisa mexicana acumula ya una apreciación de 3.80%, tras diez jornadas al hilo de apreciación, volviéndose también la segunda divisa más fuerte frente al billete verde, después del rublo ruso, de acuerdo con datos de Banco Base.
Sin embargo, las tensiones externas no se han librado, como lo muestran las proyecciones del mercado que auguran un peso más depreciado hacia el cierre del año. Y es que, si bien la inflación está cediendo, no parece regresar rápidamente al objetivo de los bancos centrales, por lo cual los especialistas han advertido que habrá que considerar tiempos de inflaciones altas por más tiempo. Tampoco pueden descartarse más choques por la pandemia o la guerra en Ucrania.
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