Al límite del tiempo establecido por ley y tras nueve horas de discusión en el Pleno de San Lázaro, diputados aprobaron la Ley de Ingresos de 2023, con lo que ahora fue remitido al Senado, en donde también se analizará el gasto propuesto para el año próximo.

La propuesta presupuestal de Hacienda fue aprobada ayer, jueves, por 266 votos a favor por parte de Morena, Partido Verde y del Trabajo, en tanto que obtuvo de la oposición 201 en contra por parte de los grupos opositores, quienes cuestionaron ampliamente las propuestas, sobre todo en materia de supuestos macroeconómicos.

Por ejemplo, Salomón Chertorivski, miembro de la Comisión de Presupuesto, argumentó que su partido, Movimiento Ciudadano, argumentó que "todo el marco macro que presentan es errado, sobrestiman y subestiman, el de ustedes es absolutamente irresponsable".

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Desde la bancada panista, el legislador Carlos Valenzuela aseguró que el voto en contra se fundamentó en que se está elevando la deuda en 1.2 billones de pesos en 2023, remarcando que el gobierno "ya se acabó" los fondos de estabilización.

Otras quejas fueron en torno a la estimación petrolera. En ese sentido, el perredista Miguel Ángel Torres aseguró que estaba sobreestimada. "Entregarán a su patrón de palacio nacional una bolsa multimillonaria para el gasto electoral del próximo año", acusaron.

Pese a estas críticas, la iniciativa se aprobó sin cambios, lo que supone ingresos totales para la Federación 8 billones 299 mil 647.8 millones de pesos (mdp) y un endeudamiento neto del Gobierno Federal de un billón 168 mil 313.9 millones de pesos.

El dictamen ahora pasará al Senado, en donde también se discutirá la Ley de Egresos, es decir, el gasto propuesto por Hacienda y Crédito Público. Por ley, los senadores tienen como plazo el 15 de noviembre para su discusión y eventual aprobación.