El presidente nacional de Amigos Pro renal-Dona Vida-Recibe Esperanza, Gonzalo Rodríguez Pinal, calificó como "una gran lástima" la ausencia de las principales autoridades federales de salud en la ceremonia por los 25 años del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra), celebrada el pasado 26 de mayo en la Ciudad de México.

Durante una entrevista con La Política Online, el activista criticó que en el acto no estuvieran presentes el subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud, David Kershenobich Stalnikowitz; el director general del IMSS, Zoé Robledo; ni el jefe de gobierno capitalino, Martí Batres. A su juicio, la ausencia evidenció la falta de prioridad que el Gobierno federal otorga al tema de la salud renal y a la política de trasplantes en el país.

Rodríguez Pinal recordó que viajó desde Baja California "con la convicción de iniciar una etapa diferente" al cuarto de siglo del Cenatra, pero se encontró con un evento "más académico que gubernamental", en el que -dijo- se repitió el mismo diagnóstico expuesto hace 15años y no se presentaron nuevos compromisos.

Según el activista, México sigue estancado en torno a las 19 mil intervenciones anuales y estados como Baja California tienen listas de espera que superan los 5 mil pacientes para trasplante de riñón, sin que exista un registro claro del orden en que serán atendidos. "No salimos del mismo número y nadie explica por qué", apuntó.

Denunció además que la procuración de órganos en instituciones públicas suele hacerse de madrugada y que los órganos terminan concentrándose casi exclusivamente en Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara y Ciudad Obregón, sin transparencia sobre los receptores. "No sabemos quién lo va a recibir ni por qué", reclamó.

El dirigente reconoció a la nueva titular del Cenatra, la doctora Rosa Erro Aboitiz, pero advirtió que su llegada representa apenas "una luz de esperanza" si las demás instancias federales no se involucran. Recordó que el anterior director, Salvador Aburto Morales, "luchó con muchas propuestas, pero los avances siguen sin materializarse".

Aunque dejó varias preguntas a la nueva directora del Centro Nacional de Trasplantes. "Como órgano regulador no ha hecho lo que le corresponde. No es trabajo de oficina, es trabajo de ir a los hospitales gubernamentales, hacer las invitaciones rectas. Si yo le pregunto a la doctora Erro ahorita, ¿cuántos pacientes renales tiene México? Pues no lo sabe. Debería de saberlo", cuestionó. 

"¿Cuántos pacientes renales tiene México?", insistió. "¿Cuántos pacientes renales tiene en diálisis peritoneal? ¿Cuántos pacientes renales tiene en diálisis peritoneal automatizada? ¿Cuántos pacientes renales tienen hemodiálisis? ¿Cuántos pacientes renales van al proceso de trasplante? ¿Cuántos han terminado su protocolo? ¿Cuántos se han trasplantado? ¿Cuántos han sido un éxito después de los primeros cinco años? ¿Cuántos han muerto?".

"Esa pregunta es tuya, doctora Erro, son 10 parámetros. Contéstamelos a mí públicamente. Yo la reto a la doctora Erro a un debate público, en el tema de la salud renal, en México o en cualquier parte de mi país que ella quiera, ahí estaré", lanzó la provocación Rodríguez Pinal.

Rodríguez Pinal y Roberto Pedraza de Amigos Pro Renal.

LPOEder López Aguilar

Al ser consultado sobre el mensaje que enviaría a los funcionarios ausentes, Rodríguez Pinal pidió "sensibilidad de servidores públicos", agregando que solicitará reuniones personales con Kershenobich, Robledo, Batres y los presidentes de las comisiones de Salud del Congreso. "Son ellos los responsables. No necesito representantes. Me tendrán que recibir personalmente", sentenció.

A su vez acusó la influencia de intereses privados en el sistema de trasplantes y advirtió que este fenómeno está impidiendo la construcción de un modelo verdaderamente público, justo y equitativo.

Finalmente, hizo un llamado a las autoridades federales a dejar de servirse del sistema de salud y comenzar a servir a los ciudadanos, adelantando que, de no obtener respuesta, las organizaciones civiles que encabeza intensificarán su campaña pública para exigir un plan nacional de trasplantes con metas claras.

"Les mando a cada uno de ellos esa gran invitación, esa gran sensibilidad de servidores públicos, no de servirse del público", concluyó.