"Queremos que a lo interno del PAN se modifiquen y reformen varias cosas que han provocado el aislamiento del partido político respecto de la ciudadanía, por lo que hemos pedido a las candidatos a dirigir el comité directivo estatal de PAN a que tengan el compromiso de abrir el partido", aseguró el ex gobernador de Baja California, Ernesto Ruffo sobre el acuerdo que firmaron dos aspirantes a dirigir a Acción Nacional en Baja California.
Se trata de una abierta provocación a la dirigencia nacional que todavía ostenta Marko Cortés, hoy senador panista, y que se renovará el próximo domingo 10 de noviembre. Pues el perfil que busca posicionar la actual dirigencia como su continuidad es el diputado federal Jorge Romero a través de un voto cerrado entre los militantes inscritos en el padrón del PAN (que asciende a poco más de 277 mil personas).
En contraste, la retadora que es lejana a la actual cúpula, la tlaxcalteca Adriana Dávila, sí respalda una elección abierta. Esta propuesta ha recibido el rechazo no sólo de Marko Cortés y Jorge Romero sino de quienes respaldan la continuidad del grupo en el poder nacional, debido a que aseguran que un voto de cualquier ciudadano que quiera participar, sin que esté en el padrón nacional, permitiría que Morena y la 4T se apropien del proceso interno.
En entrevista exclusiva para LPO, el primer gobernador emanado de Acción Nacional explicó el "acuerdo de institucionalidad, unidad y democracia" que impulsa en conjunto con Alejandro González Alcocer y José Guadalupe Osuna Millán, otros exmandatarios blanquiazules de Baja California, para que el PAN evolucione y permita la inclusión a ciudadanos de todos los sectores.
Ruffo Appel explicó que al abrir el PAN "quiere decir que estén dispuestos a que se hagan procesos primarios abiertos para seleccionar a lo candidatos y las candidatas, ya en un proceso secundario, la militancia podrá decidir dentro de los que resulten seleccionados de forma pública".
Además de aceptar un proceso abierto, las candidatas a dirigir Acción Nacional en BC se comprometieron a la creación de "un pequeño INE al interior del PAN, de manera que las elecciones internas cuenten con un sólido sistema operativo", entre otras reformas. Se trata de las panistas Lizbeth Mata Lozano y Amintha Briceño Cinco; ambas vinculadas al grupo de Santiago Creel y Marko Cortés a través de Kiko Vega, aunque con ánimo de tener mejores resultados que Mario Osuna, el cual también pertenece a ese grupo.
Todas estas reformas también fueron solicitadas a los candidatos a la dirigencia nacional del blanquiazul, sin respuesta concreta, por lo que el propio Ruffo Appel ya plantea la posibilidad de un Plan B.
"Si se hacen patos, nosotros vamos a continuar organizando, complementando a la ciudadanía y vamos a procurar tomar al PAN desde afuera. Si se encierran y continúan haciendo lo mismo, vamos a luchar para que el PAN finalmente se abra. Si no se abre en un proceso en el que todo el mundo pueda entrar, lo vamos a abrir a como dé lugar", aseveró Ruffo Appel para finalizar.
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