Pasó cerca la bala de la recesión en la economía mexicana. Al menos en el primer trimestre del año. Sin embargo, la perspectiva es retadora, sobre todo en medio de la incertidumbre y con los altibajos casi emocionales del gobierno de nuestro principal socio comercial.

Las cifras reportadas por el INEGI estuvieron por encima de las expectativas. Un crecimiento de apenas 0.2% en el primer cuarto del año sirvió para librar la recesión técnica, que se da cuando se registran números rojos durante dos trimestres seguidos.

A pesar de que se demostró (contra todo pronóstico) que el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum tenía "otros datos", el panorama para México en el contexto económico local y externo está en riesgo por ciertos factores que amenazan la racha positiva del país.

El factor más influyente es la relación comercial con Estados Unidos, pues existe una muy estrecha correlación entre los principales sectores económicos que componen el PIB, con la actividad comercial del país. Veamos.

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Alrededor del 90% de las exportaciones de México a Estados Unidos corresponden a bienes manufacturados, es decir, productos del sector industrial, que fue el más débil dentro del desagregado de actividades económicas que impidieron que el PIB creciera más en el primer trimestre de 2025. Las actividades terciarias, o industriales, reportaron una caída de 0.3%, acumulando (ahí sí), dos trimestres a la baja. Una tendencia totalmente recesiva.

La relativa "calma" en la política comercial de Donald Trump con México no va a ser eterna. Los portavoces de la Casa Blanca han sido enfáticos al asegurar que México aún tiene pendientes muy importantes en los temas que detonaron la guerra comercial: fentanilo, migración y seguridad. En cualquier momento, ‘the orange man' vuelve a la carga.

A pesar de que industrias como la automotriz, pilar de la manufactura en México y de la relación comercial con Estados Unidos, han podido hacer que Trump revire en algunas de sus decisiones, como las dos órdenes ejecutivas que firmó en días pasados para que no se les empalmen los aranceles y se definan a algunos límites, no quita el dedo del renglón.

La relativa "calma" en la política comercial de Donald Trump con México no va a ser eterna. Los portavoces de la Casa Blanca han sido enfáticos al asegurar que México aún tiene pendientes muy importantes.

Apenas en el evento de los 100 primeros días de gobierno, el presidente republicano insistió en que no quieren en EU los autos mexicanos ni canadienses y que no descansará hasta que las plantas armadoras se muden al territorio de las barras y las estrellas.

Por otra parte, y a pesar de que fue el campo, o las actividades económicas primarias, las que sacaron la cara por el PIB en el primer trimestre de 2025. Un crecimiento nada más, ni nada menos de 8.1% del sector agropecuario. Es también el principal riesgo para los siguientes meses del año. Me explico.

Las actividades del sector primario reportaron en el primer periodo de este año un rebote, luego de una tendencia a la baja, que inició en el primer trimestre de 2023, esto con base en los datos presentados por el INEGI. En este contexto, la debilidad sigue latente. Hay que considerar los efectos adversos que tienen los fenómenos climáticos sobre este sector, especialmente las sequías.

Cuartoscuro

Por si fuera poco, preocupan temas como la amenaza del gusano barrenador al ganado, cuyo combate del lado mexicano ha sido criticado fuertemente por Estados Unidos, al grado de amenazar al Gobierno de México con detener el comercio bilateral de ganado, si no se resuelven sus demandas, entre ellas, que se deje operar sin estorbos a la empresa Dynamics Aviation, especialista en combatir a la plaga.

También, la controversia que persisten por el maíz transgénico representa una amenaza a las pujantes actividades primarias, y todavía más alarmante, la imposición de un arancel adicional de 21 por ciento al jitomate mexicano a partir de julio, dando por terminado un acuerdo firmado entre ambos países en 2019. Ahí, Trump busca impulsar la producción nacional de fruto rojo, del cual México abastece el 90 por ciento de sus importaciones.

Como podemos ver, hay riesgos que mantienen débiles las expectativas positivas de la economía mexicana. El gobierno afirma que cada semana se evalúan los avances del Plan México, que tiene la finalidad de activar el crecimiento económico del país, y que con eso basta. Veremos.