El fraude electoral en México es una constante de las últimas décadas. El propio presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, denunció haber sido víctima dos veces de la adulteración de los resultados en 2006 y 2012. Ya en el Gobierno, AMLO encara varias peleas con poderes que considera enemigos de su "Cuarta Transformación". 

En ese combo entran la Corte Suprema de Justicia, los medios de comunicación y el Instituto Nacional Electoral. Este último es el órgano encargado de organizar y controlar los procesos electorales. La disputa de AMLO con la justicia electoral data desde el comienzo de su sexenio en donde acusó a su presidente, Lorenzo Córdova, de estar afiliado al opositor Partido Autonomista Nacional (PAN) y conspirar contra los referéndum impulsados por el gobierno como el revocatorio de hace tres semanas y la consulta para enjuiciar por corrupción a los últimos seis presidentes mexicanos. 

López Obrador envía reforma electoral al Congreso: "Dejaremos atrás la historia de fraudes"

En ese marco, el Gobierno venía amagando con la posibilidad de impulsar una reforma política destinada a vaciar el INE y añadir fuertes cambios en el mecanismo de elección. Este jueves, AMLO y su secretario de Gobierno, Adán Augusto, anunciaron el envío al Congreso de una reforma electoral, con la que afirma que se dejará atrás "de una vez y para siempre" la historia de fraudes, la cual implica fuertes recortes en materia democrática que promete ahorros por hasta 24 mil millones de pesos.

El proyecto fue presentado por el titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México, Horacio Duarte, quien participó en la elaboración del documento. "Él sabe muy bien lo que se necesita y requiere para que se garanticen elecciones limpias y libres y que dejemos atrás de una vez y para siempre la historia de fraudes electorales en nuestro país", dijo el mandatario desde Palacio Nacional.

Lorenzo Córdova, presidente del INE.

Cuartoscuro

En el recinto, Duarte explicó que la iniciativa implica la modificación de 18 artículos a la Constitución y tiene como objetivo "abaratar" la democracia del país. "Que se deje de estar gastando dinero en procesos electorales y que se destine a temas sociales, infraestructura".

 Con la reforma se propone la sustitución  del INE por uno nuevo, que se llamará Instituto Nacional de Elecciones y Consultas, el cual además implicará la federalización de las elecciones, es decir, que desaparecerán los organismos locales.

Córdova aseguró que "no es necesaria" una reforma política como la que propone AMLO

"Derivado de este nuevo modelo de autoridad electoral, tanto en el tema de consejeros y magistrados, es decir, de Tribunal Electoral, habrá designación de elección popular el 1 domingo de agosto, siendo los candidatos postulados por los tres poderes de la unión. Ahí hay una disminución de consejeros", señaló Duarte.

Como ya había adelantado López Obrador, se busca la elección popular de autoridades electorales: "Derivado de este nuevo modelo de autoridad electoral, tanto en el tema de consejeros y magistrados, es decir, de tribunal electoral, habrá designación de elección popular el 1 domingo de agosto, siendo los candidatos postulados por los tres poderes de la unión. Ahí hay una disminución de consejeros", detalló el funcionario.

Otro punto clave será la reducción de la representación legislativa con la eliminación de legisladores plurinominales y la reducción sustancial del número de legisladores federales y locales: un recorte de hasta 200 diputados y en el Senado una reducción a solo 96 representantes; en tanto que en los congresos locales se platea máximo 45 legisladores, dependiendo de la población de cada entidad. 

Con la reforma se propone la sustitución del INE por uno nuevo, que se llamará Instituto Nacional de Elecciones y Consultas, el cual además implicará la federalización de las elecciones, es decir, que desaparecerán los organismos locales.

Sobre este punto, se le cuestionó al mandatario si con esto no se buscaba beneficiar a Morena. "No hay intención de que se imponga un partido único. Queremos una auténtica democracia en el país y se termine con los fraudes electorales. Que sea el pueblo el que elija libremente a sus representantes", defendió por su parte López Obrador. 

Para que la reforma política sea aprobada requiere de una mayoría calificada que el oficialismo no tiene. La oposición nucleada en el espacio "Va por México" integrado por el PRI, PAN y PRD viene de frenar la reforma eléctrica y todo indica que tomará la misma postura en esta nueva iniciativa a la que consideran una forma de control político de los comicios que no brinda transparencia.