Radicalismo
UCR: el más político de los partidos
Por Josefina Mendoza
El radicalismo bonaerense demostró que es el único partido en condiciones de darse una discusión de estas características. Estamos preparado para liderar y para seguir fortaleciendo Juntos por el Cambio.

Hay una frase acuñada por los radicales que reza "donde hay dos radicales, hay una interna". Aquellos que no son radicales pero practican la política, también la conocen y a veces le agregan "como le gustan las internas a los radicales (eh!)". Lo cierto es que sí, normalmente tenemos discusiones internas, discutimos ideas, programas políticos, visiones de partido, visiones de la política, de nuestros distritos, del país. No se si nos "gustan", es la mejor forma que encontramos de poner blanco sobre negro, de debatir democráticamente. Sino podemos ponernos de acuerdo, vamos a elecciones internas y los afiliados eligen. La historia de la UCR está marcada por la discusión interna y en gran parte nuestra historia es una parte importante de la historia de la política argentina, somos un partido que ha contribuido con sus aciertos y sus errores, a la vida democrática, institucional y republicana de la Argentina.

Hoy, luego de habernos dado nuevamente el proceso de una interna en la provincia de Buenos Aires, es importante el balance y el ser capaces de estar a la altura de lo que viene. El radicalismo bonaerense demostró que está de pie y que es el único partido en condiciones de darse una discusión de estas características, con amplia participación de los afiliados (más de cien mil correligionarios de toda la provincia participaron y emitieron su voto), con gran compromiso de toda la dirigencia. Entendimos que la democracia se fortalece con discusión, que así se dinamizan las instituciones políticas y que el resultado de las discusiones internas es fortalecerse de cara a la sociedad.

En tiempos en los que los argentinos ponemos mucho en juego, con gran parte de la sociedad descreída de la política, en tiempos en los que la sociedad demanda previsibilidad y el gobierno actual no la garantiza, el radicalismo estuvo en boca de los medios y se fue generando mucha expectativa en torno a las elecciones internas. De alguna manera, volvimos a recuperar espacio en la escena política.

La UCR así, no solo demostró que es un partido político vivo y democratico sino que es el más político de todos porque debate de cara a la gente sus ideas. Somos un partido que tiene vocación de poder, tiene candidatos, tiene músculo y estructura para hacerlo. Demostramos ser un partido que tiene la capacidad de entender cuál es su lugar y su rol en la actualidad.

El desafío ahora, es caminar juntos, entendiendo que las diferencias pueden ser un catalizador de buenas ideas en base a consensos y que como en todo aspecto de la vida, la verdad y la razón suelen estar en la sana síntesis de propuestas diferentes.

Hoy, hombres y mujeres del radicalismo bonaerense tenemos la enorme tarea de acompañar a Maximiliano Abad y a Erica Revilla en la conducción del partido, ambos son una síntesis de renovación, visión de futuro, compromiso con el presente y con convicción, con la convicción de que el principal objetivo es llevar adelante, todos juntos, la profundización de aquello que veníamos gestando desde el 2015: la modernización y ampliación del partido entendiendo que el radicalismo debe ser vanguardia. La convicción de seguir construyendo ese radicalismo cercano y empático.

Sabemos que somos un partido listo para salir a la cancha, preparado para liderar y para seguir fortaleciendo Juntos por el Cambio porque la sociedad merece que la política eleve su nivel de análisis y discusión. ¡Vaya si tenemos desafío entonces! Elevar el nivel de discusión de la política no es tarea fácil en la Argentina de hoy. Decía Julia Pomares, Directora Ejecutiva de CIPPEC, hace un tiempo atrás a propósito del debate sobre la realización o no de las PASO, "No estamos discutiendo qué transformaciones requiere la política o cómo se anticipa a los cambios que están operando en la sociedad. Si fuera así, estaríamos pensando, por ejemplo, cómo aprovechamos la aceleración digital para que los partidos políticos innoven en su diálogo con la ciudadanía y se fortalezcan".

Quizás allí se encuentre uno de los grandes desafíos de la política argentina y donde al menos quien suscribe, está convencida que la UCR tiene mucho para aportar: ¿Cómo generamos capacidad de respuesta para que los problemas no nos desborden y podamos anticiparnos? ¿Cómo abordamos los problemas de la Argentina de manera integral y transversal? ¿Acaso un país con 6 de cada 10 niños, niñas y adolescentes en la pobreza, no requiere de un nivel de debate público más alto y más serio que el que nos estamos dando?

Tenemos con quienes y con qué, tenemos equipo, debemos construir programa. Generar alternativas de representación y liderar en tiempos de pandemia, donde la política se hizo aún más fuerte, requiere de mucha responsabilidad de parte de todos los partidos políticos y de los políticos en particular. Este radicalismo vivo es capaz de estar a la altura.

Así que, ahora sí, radicales a trabajar.

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
Más de Josefina Mendoza

La animalización de la política

Por Josefina Mendoza
La política, toda, le debe a los argentinos un debate sincero y profundo, no en likes ni tuits.

Cambio con continuidad: por un radicalismo protagonista

Por Josefina Mendoza
No hay radicalismo fuerte, vigoroso, representativo y competitivo, sino seguimos por la senda de lo que empezamos en el 2015.