Tras las fuertes críticas por no haber acertado el resultado de la primera vuelta, se publicó la primera encuesta de cara al balotaje del 30 de octubre. Se trata de IPEC quien ubica a Lula diez puntos arriba de Jair Bolsonaro con 55 por ciento de los votos válidos. Esta encuestadora fue una de las que más se equivocó en la primera vuelta, cuando vaticinó que Lula le ganaría por 17 puntos a Bolsonaro. Fueron apenas cinco.

Ahora, el sondeo de esta firma asociada a la cadena Globo, amplía la ventaja del ex presidente en el nordeste con más de 70 por ciento de los votos, le da una leve ventaja en el sudeste y pierde en el Norte/Centro-Oeste y el Sur por 10 y 20 puntos respectivamente. 

¿Cuáles fueron las claves de la remontada de Bolsonaro?

Las encuestas estuvieron en el ojo de la tormenta por no anticipar el volumen de votos que fueron para Bolsonaro y por eso, el bolsonarismo presentó una denuncia en el Supremo Tribunal Federal para que sean investigadas por la Policía Federal. Los diferentes institutos se defendieron bajo el argumento de que hubo gente que decidió a último momento y sostuvieron que su trabajo debe basarse en los votos totales. 

La encuestadora IPEC fue una de las que más se equivocó en la primera vuelta, cuando vaticinó que Lula le ganaría por 17 puntos a Bolsonaro. Fueron apenas cinco.

La campaña no tuvo ningún momento de distensión y tanto Lula como Bolsonaro comenzaron a buscar apoyos. El Presidente logró el de 8 gobernadores, entre los que se destacan los tres Colegios Electorales más grandes como Minas Gerais, Río de Janeiro y San Pablo, mientras que Lula obtuvo las voluntades de 4 gobernadores, Ciro Gomes, Simone Tebet y el ex presidente, Fernando Henrique Cardoso.

Los partidos PSDB, MDB y Unión Brasil, determinantes para el equilibrio en el Congreso, se manifestaron neutrales y dieron vía libre para que cada estado defina sus apoyos.