Lula recibió a sus ministros en una reunión de urgencia en la residencia presidencial de Granja do Torto para discutir la crisis que sufre el gobierno luego de la encuesta publicada por Datáfolha que marca una caÃda de 11 puntos en dos meses.
Según publica el diario Globo, el encuentro tuvo lugar dos dÃas después de la divulgación de la encuesta y tuvo un elemento particular: no contó con la presencia del ministro de Hacienda Fernando Haddad, a quienes los presentes le adjudican al responsabilidad de la crisis. La excusa de su ausencia fue su viaje a Medio Oriente pero lo cierto es que todos los ministros le hicieron saber Lula el enojo con el ex candidato a presidente.
LPO pudo confirmar que de ese encuentro fueron de la partida el núcleo principal del gabinete como el secretario de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, el jefe de la Casa Civil Rui Costa y el secretario de Comunicación, Sidônio Palmeira.
También participaron del encuentro la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, que es la principal crÃtica de Haddad dentro del partido y suena para la SecretarÃa General de la Presidencial y el de Minas y EnergÃas, Alexander Silveira.
La imagen de Lula cayó 11 puntos en dos meses y es la peor de todos sus mandatos
Los funcionarios le hicieron un diagnóstico a Lula en el que sostienen que lo que empujó la crisis de imagen fueron las medidas económicas que generan descontento en la publicación y un flujo grande de comentarios negativos en redes sociales.
Las medidas puntuales que apuntaron son el impuesto a las blusas de 2023. la idea del impuesto a la transferencia electrónica conocida como Pix, la devaluación y el aumento de precios de los alimentos.
En la reunión también se habló de un problema de comunicación y que hay poca percepción de lo que ha hecho el Gobierno para mejorar la vida de la población. Como reveló en exclusivo LPO, Palmeira trabaja en una campaña de comunicación para abordar esta situación.
La idea del Gobierno es intensificar en los próximos meses el nuevo estándar de comunicación y también cambiar el enfoque: centrar la atención en los servicios al ciudadano.
El enojo con Haddad no es nuevo y desde el principio hay dos puntas de lanza de la ofensiva contra el ministro. El Jefe de Gabinete Rui Costa dentro del gobierno y Hoffmann dentro del Partido de los Trabajadores.
Globo remarca en este sentido que hay presiones para que Haddad y algunos de los colaboradores del ministro abandonen el cargo porque aseguran que decisiones tomadas por el gobierno, como la revocación de la inspección Pix el 15 de enero y el anuncio conjunto del plan de recorte de gastos y de exención del Impuesto sobre la Renta (IR) para quienes ganan hasta R$ 5.000, llevaron a Haddad a una derrota.
El ministro, que estaba en contra del doble anuncio, fue superado en votos y aún asà tuvo que anunciar él mismo las medidas. Las versiones que circulan apuntan que Lula se estarÃa inclinando hacia el lado de Rui Costa en detrimento de Haddad pero fuentes cercanas a la situación apuntan que es difÃcil vaticinar que lo saque del ministerio porque serÃa "reconocer su propio fracaso".
Lula piensa en su reelección y diseña una nueva estrategia para relanzar su imagen
El fondo de la pelea que tiene que administrar Lula también está relacionado con una eventual sucesión de Lula, ya que, Rui Costa y Haddad son nombres que aparecen en el listado de candidatos para 2026 en caso que Lula no vaya por la reelección.
Si faltaba elementos para la preocupación, la consultora Paraná publicó una encuesta en donde ubica a Lula perdiendo con Bolsonaro tanto en primera como en segunda vuelta.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
La devaluación del real pone en riesgo el comercio fronterizo con Paraguay
Brasil lanza un fuerte ajuste fiscal para enfrentar el coletazo del triunfo de Trump
Lula elige a un ortodoxo para presidir el Banco Central y hay calma en el mercado
La devaluación del real desata una nueva guerra entre Lula y el Banco Central
Feroz interna en el PT: un sector quiere la cabeza del presidente de Petrobras
