Editorial
El victimario de la grieta
Por Gonzalo Arias
Pese a lo que vaticinaron nanalistas y una gran parte de la clase dirigente, el "fenómeno Milei" está lejos de extinguirse ante el inminente proceso electoral.

 Pese a lo que apresuradamente vaticinaron no sólo algunos analistas sino una gran parte de la clase dirigente, el "fenómeno Milei" está lejos de extinguirse ante el inminente proceso electoral. Consolidado como "tercera fuerza" a nivel nacional, genera expectativas en los sectores jóvenes y, si bien no renuncia a dar la sorpresa y meterse en el ballotage, ya está condicionando las estrategias de las dos grandes coaliciones que venían hegemonizando la competencia electoral y la dinámica política hasta el 2021.

Después de una sobreexposición mediática que tras las elecciones de 2021 lo llevó a enredarse en varias polémicas por sus desdeñables declaraciones respecto a la tenencia de armas o la venta de órganos, y a caer sostenidamente en las encuestas, promediando el año pasado pareció ya calibrar mejor su estrategia. El dirigente libertario y su entorno parecieron entender que ante el escenario de profunda crisis económica, política y social reinante lo mejor era "administrar" sus apariciones mediáticas; que no sólo el contexto y el clima de expectativas negativas lo favorecía, sino también las permanentes internas en las principales fuerzas políticas que daban cuenta del profundo desacople entre la agenda de la política y las principales preocupaciones y demandas ciudadanas.

Tras refugiarse por varios meses en un estratégico silencio que le permitió sortear el temporal, comenzó a concentrar toda su impronta discursiva en sus críticas a los dirigentes políticos, oficialistas y opositores por igual. Dejando por ahora atrás lo que él mismo denominó "debates filosóficos", las citas a sus autores de culto y las propuestas extremas, y confiando que es desde ese discurso donde podría "conectar" con importantes sectores de un electorado que muestran niveles cada vez más importantes de descontento, comenzó a hacer la transición entre la política casi exclusivamente mediática de sus comienzos a una política que no desdeña de la construcción territorial.

Como corolario de esa transformación, muy probablemente haya sido el precandidato presidencial que mejor aprovechó el tórrido verano. El autodenominado "Tour de la Libertad", que en su tramo por la Costa Atlántica ofició como una suerte de inauguración de su campaña presidencial, fue así un termómetro que le permitió ratificar en la calle lo que vienen mostrando las encuestas: no sólo el fenómeno no se está desinflando sino que parece crecer.

Un crecimiento que, por cierto, parece explicarse fundamentalmente por una gran adhesión de los jóvenes, segmento donde Milei lidera ampliamente. Y, donde además, tiene una inserción transversal que va desde universitarios porteños a jóvenes de barrios vulnerables del conurbano. En este sentido, ya hay encuestas que ya muestran que el 50% de los votantes de Milei tienen menos de 30 años. La sintonía con estos sectores se basa en el descontento con los políticos tradicionales, a quienes el relato del libertario le da la denominación de "casta" asignándole no solo la responsabilidad de los sucesivos fracasos sino también la ostentación de privilegios de "clase".

Con una alta intención de voto, que según la encuesta que se trate oscila entre los 12 y los 18 puntos, parece claro que Milei se ha consolidado como tercera fuerza. Y, a la luz de cómo se presenta el 2023, no pareciera haber mucho margen para que esto cambie. En este marco, ya parece claro que el libertario no será "víctima" de la grieta, un fenómeno fugaz condenado a desaparecer al calor de la polarización, como algunos se apuraron en pronosticar. Por el contrario, hoy pareciera ser quien amenaza con romper esa dinámica que benefició tanto a oficialismo como oposición.

No llaman la atención, en este contexto, las declaraciones de algunos referentes de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires, como el precandidato a gobernador Martin Tetaz, quien insistió en un acuerdo y puso el foco en un escenario probable: que la fortaleza de intención de voto de Milei a nivel nacional, y en la provincia en particular, en el marco de una elección simultánea, conspire contra las chances de la oposición de vencer a Kicillof.

Una reciente encuesta de Aresco, da cuentas de que con el 18,8%, Milei es el precandidato con más intención de voto en la provincia, seguido por Bullrich con 15,7%, Massa con 15,5, y Rodríguez Larreta con 12,7%. El sentido común y la simple aritmética indicarían que si el libertario se arrima a los 20 puntos en territorio bonaerense, la suerte de una provincia que será clave para la gobernabilidad y sustentabilidad del pretendido plan de "profundas reformas" que propugna la oposición estaría echada.

Por ello, algunos referentes de Juntos por el Cambio más discretos que el economista radical, buscan diseñar estrategias para evitarlo. Conscientes de que un acuerdo electoral con Milei parece casi imposible, piensan en intentar captar algo del voto libertario con Espert a la vez que intentar presionarlo con la acusación de "funcional" al kirchnerismo para que no presente candidato propio a gobernador. Ambas alternativas, al menos con el escenario tal como aparece planteado hoy, parecen insuficientes.

Mientras tanto, Milei dice trabajar en el diseño tanto de un equipo de gobierno como de estrategias y candidaturas en los diversos distritos. Por ahora elige no revelar nombres, sabiendo que si lo hace se expone a posibles polémicas y desgastes prematuros, corriendo el riesgo de correrse del posicionamiento y eje discursivo que lo viene sosteniendo en esos asombrosos niveles de intención de voto.

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
Más de Gonzalo Arias

Un nuevo round

Por Gonzalo Arias
Aun cuando tanto desde el gobierno como desde la oposición "dialoguista" se percibe un clima más favorable para su aprobación, el oficialismo no ha logrado disipar la incertidumbre.

La oposición, entre las urgencias y el tiempo

Por Gonzalo Arias
El virtual abandono de funciones estatales básicas como la salud y la educación, podría incidir pronto en la temperatura social.

La paradoja del ajuste con expectativas

Por Gonzalo Arias
En un escenario donde el efecto combinado de "licuadora" y "motosierra" , cada vez resulta más difícil recrear expectativas por fuera de la dimensión simbólica.

Mucho ruido, ¿pocas nueces?

Por Gonzalo Arias
Más allá de los "éxitos" que el gobierno destaca en la macro, los datos de la economía real dan cuentas de que nos adentramos en un contexto muy complejo.

Cruzando el Rubicón

Por Gonzalo Arias
El gobierno de Milei parece adentrarse en un territorio que ya parece marcarle los contornos de un campo de acción que probablemente no sea tan amplio como anhelaría en función de sus aspiraciones fundacionales.

¿Qué ves?

Por Gonzalo Arias
No solo empresarios, Wall Street e inversores extranjeros, sino también el propio FMI, vienen planteando la gran incógnita de la gobernabilidad.