Los fiscales Edery y Schiappa Pietra acusaron al ex fiscal Regional de Rosario, Patricio Serjal, de recibir dinero a cambio de protección judicial a la banda que operaba los casinos ilegales.

Joaquín Gramajo intentó avanzar contra los fiscales que vincularon a Traferri con el juego ilegal y amenazó con mostrar información clasificada de la justicia federal. El senador negó los hechos.

Con cinco votos a favor y uno en contra, el máximo Tribunal evitó que continúe la investigación al senador de San Lorenzo señalado como organizador de la mafia que regenteaba los casinos ilegales.