Pablo Iglesias despejó cualquier duda en la "Uni de otoño" de Podemos: "¿Quién piensa que le puede ir bien a una candidatura de izquierda si a Podemos le va mal en las municipales? Hay que ser estúpido". Las palabras del exlíder de los morados tenían una destinataria clara, Yolanda Díaz, pero también iban dirigidas al resto de la izquierda que ha respaldado desde el vamos a la vicepresidenta segunda. Los mensajes y las ausencias en el foro de Podemos este fin de semana indican la hoja de ruta de la formación.
El exnúmero dos del gobierno estuvo escoltado por la ministra de Igualdad, Irene Montero, y el confundador del partido, Juan Carlos Monedero, el núcleo duro de Podemos. Ione Belarra, titular de Derechos Sociales, solo participó en la inauguración y en el cierre del encuentro por haber dado a luz hace pocas semanas, lo que le dio a Iglesias la posibilidad de mostrarse como el líder de facto de la formación. El foro se transformó en un acto de relanzamiento, con un nuevo logo y el anuncio de las candidaturas para mayo.
Se trataron de unas jornadas dedicadas a la militancia y a asegurar la vigencia de los morados, esta vez sin representantes de Izquierda Unidas o los comunes. Tampoco acudió al Teatro Coliseum la ministra de Trabajo. "Es un evento de la orgánica y se entienden las ausencias", dice a LPO una fuente que participa del armado de Díaz. Sin embargo, el eurodiputado de Bilud Pernando Barreda y la senadora de ERC Sara Bailac dieron el presente. Un escenario así era inimaginable hace apenas un año.
Como dijo Monedero, Podemos quiere ser "la nave nodriza de la unión de la izquierda" y "quien quiera liderar todo lo que no representan los viejos partidos tiene que estar a la altura de los retos y respetar a la fuerza política que más ha hecho desde la izquierda en la España reciente". Iglesias y sus partidarios salieron este lunes a subrayar que nunca se nombró a la vice segunda y que todo es una elucubración de los medios, aunque el cortocircuito a esta altura ya es patente.
Los morados han resentido la debacle electoral en Andalucía y defienden que el esquema de alianzas simplemente no funciona. "Pasamos de 72 diputados a 33, tenemos que recuperar el proyecto y volver a convocar", asegura a este medio un miembro de la formación. El pedido de "respeto" a Podemos apuntaba además a Alberto Garzón, con quien deberán negociar las candidaturas de cara a las municipales y autonómicas. Las partes se darán hasta el 31 de enero para definir nombres en los municipios y regiones donde la alianza ha ido bien.
Podemos se siente apartado del armado de Yolanda Díaz y apuesta por fortalecerse en las municipales
Las diferencias entre Podemos y Díaz son muchas y algunas parecen insalvables. Para la vice las siglas son prescindentes, no así para los de Iglesias, que ven a Podemos como la columna vertebral de cualquier frente de izquierdas. La ministra de Trabajo cuenta con el apoyo de Garzón, Enrique Santiago y los comunes y ha tendido puentes con el PSOE, cuidándose de no tensar la cuerda con Moncloa. Los morados, en cambio, sienten que plegarse a Díaz va en contra de su propia identidad -un exintegrante habla de "desvío sectario" a instancias de Iglesias- y podría dejarles fuera de juego dentro de seis meses.
A diferencia de Sumar, un proyecto ideado para las generales y no para las municipales, Podemos tiene que revalidarse en las urnas y salir bien parado si quiere ganar músculo para disputarle espacio a la vice dentro del frente de izquierdas. Por eso Montero ha levantado el perfil en los últimos meses, tanto en el comité electoral del partido como desde el cargo de ministra. Si Díaz llamó a aprobar la ley trans, la titular de Igualdad fue más contundente y cargo las responsabilidades sobre el PSOE.
La desconfianza en torno a Díaz se base en un doble plano: la distancia que puso entre Sumar y Podemos y la mediación con Moncloa. No es casual que Victoria Rosell, candidata del partido para el CGPJ, haya tenido un rol destacado en el foro. Los morados piensan que Díaz no ha presionado los suficiente al PSOE para que Rosell, una mujer cercana a Montero, entrase en el órgano en el proceso de renovación. Los mensajes estuvieron en cada detalle del encuentro.
Durante el evento, la formación recibió el apoyo internacional de fuerzas afines de Europa y América Latina, incluida la del presidente chileno Gabriel Boric, pensadores y dirigentes como el argentino Juan Grabois y la senadora colombiana María José Pizarro, cercanos a Cristina Kirchner y Gustavo Petro, respectivamente. En otras palabras, el partido está demostrando su alcance y desafía a Díaz a construir vínculos y reconocimiento como ha hecho Podemos.
Podemos presiona a Yolanda Díaz para meter a Rosell en el CGPJ
La aparición protagónica de Monedero es un sostén al mensaje de Iglesias. "Podemos ha sido una fuerza política generosa como ninguna otra. No hay discurso más reaccionario que el que dice que el problema son los partidos. Hacen falta movimientos sociales y poder mediático de izquierdas", afirmó el domingo el exsecretario general del partido. Ya avisó que la continuidad de Sumar solo será posible si Podemos no tiene voz y voto. La pelota está ahora en el tejado de la vicepresidenta.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
El problema de Sánchez no se apellida Puigdemont, sino Iglesias
Galicia: Pablo Iglesias pide rechazar la propuesta de alianza de Sumar y apoyar a BNG
Iglesias sobre el traspaso de poder a Díaz: "Me arrepiento, ha trabajado para destruirnos aliándose con mafiosos"
Máxima tensión entre Sumar y Podemos: no hay acuerdo sobre el ministerio y la ruptura es inminente
Belarra confirma que romperán con Sumar y Montero se despidió de Igualdad con un video en redes
