
El tiempo corre y la negociación entre el PSOE y Junts se estanca. Las condiciones de los independentista se tornan muy complejas para Ferraz y eso empuja a una repetición electoral a una semana de la fecha de constitución de la Cortes Generales.
Sin embargo, en las últimas horas en el socialismo consideran la ley de amnistÃa a los condenados del procés como una posibilidad para destrabar la situación y abrir la posibilidad de una nueva Legislatura.
Pedro Sánchez ha decidido que el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas sean los voceros con Junts en las conversaciones con los diputados catalanes.
En este proceso de diálogo es importante mencionar el rol de Salvador Illa, lÃder de los socialistas catalanes, que hace unas semanas habÃa descartado como posibilidad. Illa quiere hacer jugar su fortaleza polÃtica y no hay que descartar que sea un juego de ambigüedad coordinado con Ferraz.
Dentro de la discusion, como viene adelantando, aparece la Mesa del Congreso en donde el PSOE evalúa incorpora a nacionalistas vascos y catalanes a la directiva luego de la renuncia de Meritxell Batet. Ferraz no tiene pensado resignar la presidencia pero sà abrir el resto de los cargos ante la debilidad legislativa de los socialistas.
Por otra parte, hay un sector de Junts que está disgustado ante la encerrona de Puigdemont de forzar una repetición. El sector moderado busca más predisposición para negociar y priorizar mayor recursos para Cataluña en lugar de encerrarse en el purismo independentista. En este marco, será capacidad de Sánchez meterse en esa grieta para obtener la llave de su gobierno.
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