En Génova saben que están en un año decisivo. Alberto Núñez Feijóo sabe que tiene posibilidades reales de terminar en Moncloa y devolver a los populares al gobierno central tras la humillante caída de Mariano Rajoy en 2018. Por eso el partido quiere instalar la idea de que el triunfo del dirigente gallego es inevitable, más allá de lo suceda en las elecciones de mayo, y que Pedro Sánchez es cosa del pasado.
Para ello cuentan con una serie de encuestas que dan al PP el primer puesto entre las formaciones. El sondeo de Sigma Dos publicado el domingo en El Mundo asegura que el PP sumaría el 30,9% de los votos y alcanzaría así 135 diputados, mientras que el PSOE quedaría con el 24,8% y 93 escaños en el Congreso. Si Feijóo quiere formar gobierno, los 52 diputados de Vox están a disposición del líder de los populares.
"Hay más de 600.000 personas que votaron al PSOE que ven en Feijóo esa persona transversal que es capaz de aglutinar un proyecto de transformación", dijo hoy el vicesecretario de Economía de la formación, Juan Bravo. El sondeo de Sociométrica para El Español revelado el primer día del año coincide con la de El Mundo: 30,9% para el PP y 25,6% para el PSOE. Vox, clave para un gobierno alternativo, también llega a los 52 diputados.
Los porcentajes se acercan a los de GAD3 a encargo del PP y que da a los populares un 33,2% y 143 diputados frente al 26% para los de Pedro Sánchez, con 104 escaños. En tanto, la encuesta de Data10 para OkDiario confirma la tendencia con el 31,1% para los de Feijóo y un 24,6% para los socialistas y 131 y 96 escaños, respectivamente. "El PP gana en todas las encuestas que no vengan firmadas por un militante socialista", sentenció Bravo en alusión al CIS de José Félix Tezanos, y subrayó que "la gente prefiere la moderación de Feijóo".
Lo cierto es que Feijóo viene haciendo gestos a los votantes de centro e incluso a aquellos progresistas desencantados con la deriva del PSOE bajó el liderazgo de Sánchez -tales reflejan los sondeos- al elogiar a Felipe González. "Mis tres presidentes de referencia son Felipe González, Aznar y Rajoy. Y yo voy a intentar imitar a los tres. Los tres han sido determinantes. Esa transversalidad y esa centralidad de la política es lo que le dio 200 diputados a Felipe. Me interesa saber lo que piensa Felipe sobre algo y no me interesan otros", dijo a ABC.
El expresidente de la Xunta agregó que "a Felipe lo escucho". "No solo lo escucho, sino que lo valoro y, además, me interesan mucho sus opiniones cuando está de acuerdo o en desacuerdo con lo que hago", apuntó. El giro hacia una posición centrista es parte de la estrategia del líder popular, al igual que la narrativa acerca de una victoria contundente, que con las encuestas en mano toma otra dimensión.
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