Edmundo Bal confirmó este viernes un rumor que venía circulando con fuerza las últimas semanas. Finalmente, el portavoz de Ciudadanos en el Congreso competirá por el liderazgo del partido en la asamblea general de enero. La decisión supone una ruptura con la actual presidenta de la formación, Inés Arrimadas, que busca aferrarse al cargo, y una alternativa para refrescar a Ciudadanos de cara al año electoral que se avecina.

La ejecutiva del partido aprobó el viernes pasado la propuesta de Arrimadas de ir hacia un modelo bicéfalo de liderazgo, es decir, una cabeza política y otra orgánica, que fuentes de Ciudadanos describieron a LPO como un intento de la dirigente jerezana por retener algo de poder. Bal ya estaba pensando en su propia candidatura, que contaba con el visto bueno de Francisco Igea, exvicepresidente de la Junta de Castilla y León. El entorno de Arrimadas advirtió entonces cuál sería el siguiente paso del vicesecretario general.

Arrimadas llega a Andalucía para apuntalar a los candidatos de Ciudadanos en medio de las críticas de Marín

Los afiliados deberán elegir el próximo mes a un secretario general y a un portavoz nacional con la esperanza de sacar a Ciudadanos de la desintegración. No se trata solo de la fuga de cuadros, sino de internas, filtraciones y falta de acuerdos más amplios en la dirección nacional. Arrimadas confiaba en que el proceso de renovación aquietaría las aguas y le permitiría reconquistar la confianza de las bases y los dirigentes naranjas. Sin embargo, el rol del liderazgo dominó el debate y el grueso de las críticas cayó sobre la presidenta.

Francisco Igea, exvicepresidente de Castilla y León y actual procurador de la Junta autonómica. 

Europa Press

Bal considera que Ciudadanos tiene que cambiar su conducción para enfrentar las elecciones de 2023. Las de mayo serán clave para medir al electorado y para relanzar al partido desde el municipalismo, una de las apuestas en esta nueva etapa. Bal y Arrimadas insisten en la necesidad de preservar un espacio liberal y centrista en la política española, por más reducido que este sea, y con mayor peso de las instancias municipales y territoriales. "El partido ha tocado fondo, veremos si llega a mayo", dice a este medio un miembro del partido descontento con la gestión de Arrimadas. 

Pese a que competirá contra Arrimadas, Bal dice que la suya es una candidatura para unir a Ciudadanos. Es que el portavoz parlamentario sabe que no hay margen para una disputa que termine por enterrar a la formación y, además, que la líder de los naranjas mantiene apoyos en la cúpula

Pese a que competirá contra Arrimadas, Bal dice que la suya es una candidatura para unir a Ciudadanos. Es que el portavoz parlamentario sabe que no hay margen para una disputa que termine por enterrar a la formación y, además, que la líder de los naranjas mantiene apoyos en la cúpula. Es el caso de Begoña Villacís, probablemente la única carta de Ciudadanos para mantenerse en Madrid. El problema para la vicealcaldesa de la capital es las diferencias en la dirección están afectando su estrategia electoral.

Un grupo afín a Albert Rivera pone en jaque el liderazgo de Arrimadas y profundiza la crisis de Ciudadanos

Villacís fue tentada por el PP para integrarse al partido, algo que le serviría a José Luis Martínez-Almeida. La dirigente liberal se mostró leal a Arrimadas, pese a que varias veces se insinuó que daría el salto, y ahora se enfrenta a la traición de sus concejales. La concejala delegada de Deporte en el Ayuntamiento, Sofía Miranda, aseguró el miércoles que no integraría las listas de Ciudadanos, si bien aclaró que seguiría en política. Y el concejal delegado de Innovación y Emprendimiento, Ángel Niño, fue forzado a dejar el cargo de tesorero.

Begoña Villacís y el alcalde de Madrid José Luis Martínez-Almeida.

Europa Press

Las discrepancias en el grupo municipal están vinculadas con las listas para mayo. Algunos prefieren tantear en el PP si hay espacio para ellos. Los fieles a Villacís aseguran que hay votos en Madrid para mantener presencia en Cibeles y seguir en el Ejecutivo municipal. Los más descreídos cuestionan que el partido ni siquiera tenga en mira al candidato a la Comunidad de Madrid, capaz de impulsar a los concejales en la capital. 

Ciudadanos acusa al PP de haber accedido al censo de sus afiliados en Andalucía y apunta a los tránsfugas 

La situación en Madrid grafica el tipo de partido que piloteará Arrimadas o Bal. La primera no ha confirmado oficialmente si competirá, aunque se da por descontado que lo hará y algunos hasta creen que puede retener el liderazgo. El portavoz en el Congreso no es un rostro nuevo, solo cuenta con visibilidad y foco mediático por su desempeño en la cámara. A partir de hoy comienza una campaña que marcará el futuro inmediato de la formación.