Los enviados de Joe Biden a la Argentina confirmaron el buen momento de la relación con el gobierno de Alberto Fernández, aunque ratificaron que su principal preocupación sigue siendo el avance de China en la región y apuntaron especialmente a proyectos clave de Beijing como la central nuclear Atucha III y el despliegue de Huawei.

Alberto compartió un inusual almuerzo este martes con el director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, Juan González, y la subsecretaria Interina del Departamento de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Julie Chung. Como el presidente está aislado, estuvieron en oficinas distintas de la Quinta de Olivos dialogando por videoconferencia.

Pero los contactos con los más altos niveles del oficialismo siguieron. Por la noche González y Chung cenaron en la casa de Sergio Massa y, como lo habían hecho en el almuerzo, volvieron a poner el tema China sobre la mesa. Como reveló LPO, el tema central de la gira fue tratar de recuperar terreno frente al avance de Beijing.

Los funcionarios de Biden la pidieron al Gobierno argentino "prudencia" en el acercamiento a China, que además de la ventaja que venía sacando respecto a EEUU en la última década aprovechó la pandemia para fortalecer las relaciones a través de la provisión insumos médicos el año pasado y de vacunas ahora.

Además de pedir prudencia, González y Chung le dijeron a Massa que en Washington están especialmente preocupados por el proyecto para la construcción de la central nuclear Atucha III, con tecnología y financiamiento de China. La semana pasada el secretario de Energía, Darío Martínez, y el embajador Sabino Vaca Narvaja avanzaron en las gestiones para cerrar un acuerdo.

Otro tema que inquieta a la Casa Blanca es la implementación de la red 5G con tecnología de la empresa china Huawei en la región. La disputa por el 5G es el terreno donde se libra una de las principales batallas geopolíticas entre Estados Unidos y China. Biden mantiene la posición dura de Donald Trump.

Entre los bifes de chorizo, empanadas, mollejas y entraña de una cena que duró casi cuatro horas, los enviados de Biden le prometieron a Massa ayudar a Argentina en la negociación con el FMI y también para tratar de destrabar la llegada de vacunas.

El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, junto al enviado de Joe Biden, Juan González.

Otro tema en el que hubo coincidencias fue respecto a Venezuela. Todos los comensales hablaron de impulsar "elecciones limpias" para encontrarle una salida a la crisis. En la Casa Blanca no ven con malos ojos el perfil de Alberto en la región y hasta lo imaginan con un mayor liderazgo en el Cono Sur.

En Washington están hablando de armar un eje de presidentes para llevar la relación con América Latina, ante la ruptura de la relación con Brasil su histórico socio en la región. Además de Alberto en el Cono Sur, destacan a los presidentes de México y Colombia. En ese sentido, también destacan el giro pragmático del kirchnerismo duro y no ven a Cristina como un problema.

La cena en Tigre también tuvo momentos de color como la charla en la que González contó el vínculo de su padre con el movimiento guerrillero M19 de Colombia, a lo que Malena Galmarini le contó sobre la militancia de su padre en Montoneros.

Otro momento que generó algunas risas incómodas fue cuando Julie Chung se mostró sorprendida y hasta indignada cuando Massa le contó que todavía no fue vacunado. La funcionaria estadounidense no podía creer por qué una figura de la línea de sucesión presidencial no fue inoculada. Seguramente no estaba al tanto del escándalo del "vacunatorio vip".