Por el momento no habrá aviones de caza para Ucrania. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró este martes que la prioridad es entregar los blindados y carros de combate al Ejército ucraniano, y cerró la puerta a la entrega de cazas, un pedido insistente de Volodimir Zelenski. "No vemos señales de que el presidente Putin se esté preparando para paz, lo que vemos es todo lo contrario", dijo sin embargo Stoltenberg.

El envío de los Leopard alemanes fue tema de intenso debate entre los socios de la alianza atlántica, con los países bálticos y Polonia como los principales promotores de la entrega de blindados. Ahora los países están entrenando los ucranianos para el uso de los nuevos sistemas. Pero los países de la OTAN parecen renuentes a cumplir con la última exigencia del presidente ucraniano.

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Margarita Robles, ministra de Defensa, aclaró que "todo el mundo sabe que para España no sería posible enviar aviones porque España no los tiene". Su par de Países Bajos, Kajsa Ollongren, reconoció que el gobierno de Kiev solicitó los F-16, pero que el tema debía discutirse con Estados Unidos a "puerta cerrada". La semana pasada, Zelenski viajó a Bruselas, Londres y París para presionar a los aliados.

Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN. 

Europa Press

Stoltenberg dejó entrever por qué la organización militar les puso un freno a las aspiraciones de Ucrania. "El ritmo actual de gasto en municiones de Ucrania es muchas veces mayor que nuestro ritmo actual de producción. Esto pone a nuestras industrias de Defensa bajo presión", admitió el jefe de la OTAN.

Los bombardeos rusos se intensifican y las autoridades ucranianas confirmaron que las subestaciones eléctricas de Leópolis, una ciudad en la parte occidental del país en la frontera con Polonia, fueron totalmente destruidas

Zelenski avisó a sus aliados que necesitan los cazas para hacer la diferencia en el campo de batalla. Los soldados ucranianos tratan de contener el avance ruso en el Donbás, al este del país. Los mercenarios del grupo Wagner ganan territorio en la ciudad de Bajmut. Lo que al principio sonaba como un alarde de Yevgueny Prigozhin, creador de la banda, fue confirmado por la inteligencia británica.

En Kiev confían en que finalmente obtendrán los cazas. El propio Stoltenberg declaró que Putin no tiene previsto parar la guerra, que este mes cumple su primer año. Los bombardeos rusos se intensifican y las autoridades ucranianas confirmaron que las subestaciones eléctricas de Leópolis, una ciudad en la parte occidental del país en la frontera con Polonia, fueron totalmente destruidas.

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El Instituto para el Estudio de la guerra, un think tank con sede en Washington, asegura que los avances rusos en Bajmut son marginales y a un costo humano demasiado alto. En el Donbás los bombardeos se repiten a diario y tanto Ucrania como sus aliados temen que Putin esté preparando una gran ofensiva de cara al primer aniversario de la invasión.