La crisis energética es uno de los principales temas en la agenda de Repsol, la principal petrolera española y un jugador muy fuerte a nivel internacional. Todas las alarmas están encendidas, admitió en las últimas horas el consejero delegado de la compañÃa, Josu Jon Imaz, quien admitió que Europa no contará con gas suficiente para en los próximos meses cubrir la demanda del invierno.
A su juicio, la dependencia que tiene Europa con respecto a Rusia traerá consecuencias sociales."Hoy no se puede sustituir el gas que Europa recibe de Rusia", señaló. Y auguró un "tensionamiento brutal" en el mercado.
Josu Jon disertó en un encuentro organizado por la Confederación Empresarial de Bizkaia (Cebek) titulado: "Tras dos años de pandemia y una guerra en Europa: Cómo afrontamos las empresas las nuevas dificultades".
Putin corta el gas a Polonia sin aviso previo por no pagar en rublos
En un tono de preocupación que sorprendió a un auditorio repleto de empresarios, pidió a la sociedad que haga "un esfuerzo muy importante" reduciendo el consumo. Al poder polÃtico, en tanto, le pidió acelerar "al máximo" la generación renovable.
Según su diagnóstico, la reducción del gas impactará de "forma dramática" en los próximos seis o siete meses. Por tal motivo, celebró la propuesta de ponerle un techo temporal al precio de gas. "Es razonable", dijo.
El directivo de Repsol aseguró que se necesita "estabilidad" y no se pueden dar señales "equÃvocas", pero ponderó la situación polÃtica y económica de España. "regulatoriamente es un paÃs estable y está entre los mejores en el mundo, en términos de estabilidad y de lugares en el mundo para la inversión", subrayó.
La advertencia de la petrolera española coincide con el anuncio del Kremlin, que este jueves decidió cortar una de las vÃas clave que abastecen de gas a la Unión Europea. El monopolio estatal Gazprom anunció que suspenderá el suministro por todo el gasoducto Yamal-Europa porque la dueña del tramo polaco, EuRoPol GAZ, fue sancionada por Moscú.
Repsol aprovecha el aumento del petróleo y duplica sus ganancias en el primer trimestre del año
Ante este escenario, Repsol proyecta que sus ganancias retrocederán en la segunda mitad de 2022. En el primer trimestre disparó sus beneficios con uno de los mejores resultados de su serie histórica de balances. La empresa obtuvo un resultado neto de 1.392 millones de euros, lo que supone un 115% más con respecto a los 648 obtenidos en 2021.
El 69% de toda su rentabilidad lo generó fuera de España, a través del área de Exploración y Producción que desarrolla en el exterior, con sede principal en Latinoamérica.
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