Cuando los diputados Sergio Sayas y Carlos GarcÃa Adanero fueron suspendidos de UPN por romper la disciplina partidaria durante la votación de la reforma laboral, Javier Esparza no esperaba que el PP y Vox capitalizaran la crisis al interior de las filas regionalistas. Menos aún veÃa en el horizonte una jugada de los populares para romper Navarra Suma y apostar por presentarse en solitario para las elecciones de mayo de 2023.
Desde febrero a esta parte, Sayas y Adanero construyeron Plataforma Navarra, un grupo civil que pronto podrÃa convertirse en partido y presentarse a las elecciones forales. Vox tuvo contacto con los diputados disidentes para apuntalar su proyecto en Navarra, pero el PP ha ido más lejos, ya que los considera como una alternativa para disputarle a Esparza en el caso de que busque romper Navarra Suma.
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Con Ciudadanos prácticamente fuera de juego -es el tercer socio de la coalición navarra-, la presidenta del PP en Navarra, Ana Beltrán, sugirió que podrÃa presentarse para encabezar el Ejecutivo regional. Además, semanas atrás ofreció un lugar en el partido a Sayas y Adanero, a quienes definió como "compañeros" y destacó por la afinidad ideológica con los populares. Esparza reprochó esta actitud y puso a Navarra Suma al borde de la disolución.
Esparza comentó que tomará la decisión con las bases de UPN, aunque dejó en claro que la eventual incorporación de Sayas y Adanero al PP, o bien a Vox, colocarÃa a la coalición en un callejón sin salida. Pero el lÃder de UPN es consciente de que el PP está en un momento de auge y que, en los comicios de 2019, los populares y los naranjas fueron la garantÃa para poder formar un Ejecutivo. En Pamplona observan la movida de Beltrán con impotencia.
Sin embargo, Esparza sabe que la orden viene de Génova, que no le perdona al dirigente navarro que UPN haya acordado con el PSOE el aval a la reforma laboral de Pedro Sánchez y Yolanda DÃaz. Si UPN rompe Navarra Suma es porque están pactando por debajo de la mesa con los socialistas, agitan desde el PP. Desde esta óptica, Esparza se enfrenta a una más que probable campaña en solitario.
A la presentación de Plataforma Navarra acudieron exintegrantes de UPN. Una novedad en el plano partidario podrÃa arrastrar a otros dentro de las filas de Esparza para que abandonar el partido y se sumen a Sayas y Adanero, que no piensan volver a su antigua casa. En UPN genera enfado tanto la oferta de Beltrán como la actitud de Alberto Núñez Feijóo, a quien ve como un hombre que va por todo, sin importarle las alianzas. Después de todo, al dirigente gallego le gusta gobernar en solitario.
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UPN ha afrontado otras crisis con el PP, como la de 2008, que dejó a la alianza al borde del colapso, luego de un diputado de la formación navarra votara en contra de los presupuestos del entonces presidente José Luis RodrÃguez Zapatero en el Congreso. El caso es que UPN habÃa ordenado una abstención. La desconfianza creció porque desde el partido vieron la mano del PP, que en ese momento votó en contra de las cuentas públicas. Ese acto de desobediencia terminará marcando la relación a futuro.
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