El líder del PP librará su próxima batalla en un campo que conoce bien: la financiación autonómica. Alberto Núñez Feijóo presionó este miércoles al gobierno de Pedro Sánchez para que apure un nuevo sistema que privilegie "el coste efectivo de los servicios públicos" y no beneficie a los territorios controlados por el PSOE. Para el dirigente gallego se trata de una cuestión que meses atrás le valió su liderazgo entre los barones populares y socialistas.

Los barones del PSOE y el PP se unen para presionar a Sánchez por la financiación autonómica

Feijóo había organizado en noviembre pasado una cumbre en Santiago de Compostela de la que participaron los presidentes autonómicos de Asturias, Aragón, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, La Rioja y Extremadura. Esta reunión no gustó en Moncloa, que prefiere negociar directamente con cada líder, consciente de necesita alcanzar consensos casi imposibles entre las comunidades y los partidos políticos. El Ministerio de Hacienda validó la variable de población ajustada, aunque recientemente reconoció que está abierto a contemplar un cálculo más preciso y estratificado.

Feijóo defendió ante empresarios andaluces que "debemos de sentarnos para ver cómo financiamos el 50% del gasto público de España, que lo gestionan las CCAA, frente al 20% los ayuntamientos y el 30% el gobierno central". Lo primordial, deslizó, son las personas y no los territorios. Para las comunidades alineadas con Feijóo, el reto demográfico debe definir el nuevo modelo de Hacienda. 

Lo primordial, deslizó, son las personas y no los territorios. Para las comunidades alineadas con Feijóo, el reto demográfico debe definir el nuevo modelo de Hacienda

En cambio, para María Jesús Montero -y por extensión para Sánchez- el problema es que cada comunidad plantea los criterios más ventajosos para sí misma, como la insularidad o la población flotante, difíciles de conciliar para avanzar en una propuesta acabada. El gobierno quiere monopolizar la discusión a través del Consejo de Política Fiscal y Financiera, mientras el líder del PP busca pactar una posición común en las sombras con sus antiguos pares.

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.  

Europa Press

Feijóo acusó a Montero de presentar un texto bastante indefinido y considera que Sánchez no logrará aprobar un nuevo sistema antes de concluir la legislatura. Pero para el expresidente de la Xunta de Galicia es una demanda de las comunidades autónomas que tarde o temprano deberá concretarse, y aspira a capitalizarlo en su camino a la Moncloa. Por eso el primer paso es marcar la línea y forzar al Ejecutivo a una propuesta al menos superadora.

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La asignación de recursos debe darse a partir de las personas porque "financiar territorios es lo mismo que financiar aliados de gobierno", según declaró esta mañana en Sevilla. Y volvió a reivindicar la importancia de las autonomías, otro factor que intenta aprovechar en su estrategia nacional. "A día de hoy sabemos qué es un Estado autonómico, pero nadie ha aclarado en qué consiste la España confederal, la España asimétrica o la España multinivel", sostuvo. 

En otras palabras, para Feijóo las comunidades son las que cubren los servicios públicos, "desde el paritorio hasta el certificado de defunción" y "desde la escuela infantil hasta el postgrado universitario", y por ende el reparto de recursos deberá calcularse a partir de la población de cada comunidad. Al poner en el centro a las CCAA, Feijóo inicia una estrategia de conquista desde los territorios hacia Madrid: es el diferencial que finalmente aportó a su partido tras la partida de Pablo Casado.