Sergio Massa analiza una diagonal para evitar que Nicky Caputo se quede con Central Dock Sud y se convierta asi en un actor hegemónica en el negocio de le energía eléctrica en toda el área metropolitana. Como anticipó LPO, el Ministerio de Economía no tiene capacidad regulatoria para bloquear la compra de centrales que realizó Central Puerto, la compañía en la que tiene una injerencia decisiva el hermano del alma de Mauricio Macri.

Por eso, ahora se analiza propiciar que YPF, socia minoritaria de Dock Sud, ejerza su derecho de preferencia e iguale la oferta que hizo la compañía que lideran Caputo y Guillermo Reca. También se estudia que la Anses le venda a YPF las acciones que tiene de Central Costanera, que cotiza en Bolsa, para reforzar su espalda en los negocios que comparte con Caputo.

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Como anticipó LPO, Central Puerto le compró a los italianos de Enel la vieja Central Costanera y también la porción accionaria que tenían en la Central Dock Sud. Así, con las tres centrales más grandes del país, se convirtieron en un actor ineludible en el negocio de la energía eléctrica -también son socios de Edesur-. Se trata de un sector crítico en términos de gobernabilidad, como quedó en evidencia con el impacto político y social del apagón de esta semana.

El gobierno pretende que YPF ejerza su derecho de preferencia e iguale la oferta de Nicky Caputo por la Dock Sud. La operación se completaría con la venta a la petrolera estatal de las acciones que tiene la Anses en esa central.

El consorcio liderado por Caputo compró las centrales a precio de remate -pagó 48 millones de dólares por el 75,7% de Central Costanera y 54 millones por el 41,2% de Central Dock Sud- y se presume que apuestan a un tarifazo en un eventual gobierno de Juntos, que multiplique varias veces el valor de esos activos. De hecho, según fuentes del mercado, este empresario pretende además quedarse con el control de la distribuidora Edesur, también de Enel.

La operación fue denunciada ante Defensa de la Competencia y motivó un duro pedido de informes del senador kirchnerista, Oscar Parilli, al Poder Ejecutivo. Sin embargo, ahora se abre una nueva posibilidad para bloquear el avance de Caputo, a través de la petrolera estatal YPF, propietaria de acciones de la central Dock Sud, como anticipó el sitio especializado Econojournal. 

Como la petrolera de de bandera controla el 40% de esta central térmica, tiene derecho de preferencia a igualar la oferta de Central Puerto en un plazo de un mes. De tomar esa decisión, Central Dock Sud pasaría a estar controlada en un 80% por la petrolera nacional, quedando Pan American Energy (PAE) como accionista minoritario.

Cabe resaltar que en ninguna de las operaciones mencionadas Caputo aparece de manera visible. El empresario macrista, según explicaron a LPO fuentes al tanto de la operación, sería parte de vehículos societarios del exterior.

En efecto, la compra del paquete de generación de Enel no la hizo Central Puerto directamente sino que la adquirente fue Proener, un vehículo societario distinto. Pero las riendas de la negociación con los italianos, explicaron a LPO fuentes al tanto de la operación,  la llevaron Guillermo Reca y Nicolás Caputo.

Otro aspecto escandaloso de la operación de Central Costanera fue el precio bajísimo que se declaró por activos estratégicos del país: 48 millones de dólares por la participación de Enel en Costanera frente a lo 54 millones más por la porción de Dock Sud. Ambas pagaderas "en el exterior", según detalló el informe a la Comisión Nacional de Valores de Central Puerto. 

Telam