La encuesta mensual que realiza la consultora cordobesa Pulso Social indica que un 54% de los cordobeses mantiene una valoración positiva de la gestión de Javier Milei, con una caída de 4 puntos respecto de su techo de enero, cuando orilló los 60 puntos. En espejo, el rechazo pasó de 38 a 42 por ciento.
Es interesante el dato respecto de cómo evalúan a Milei los votantes en primera vuelta de Juan Schiaretti, que es el único político de Córdoba con diferencial positivo: el 42% de ese nicho considera que el rumbo de Milei no es el correcto, versus un 24% que lo aprueba. El resto, un 24%, no sabe, por lo que el péndulo del voto cordobesista sigue siendo clave.
En ese marco, y exceptuando a los votantes de Sergio Massa en primera vuelta, los votantes de Schiaretti también son los que menos confianza tienen respecto de que Milei le encuentre la vuelta a los problemas económicos y sociales: el 36% no le tiene ninguna confianza y el 20%, algo de confianza.
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Cuando los encuestados de Pulso Social preguntaron cómo estará la situación de la economía en diciembre, sólo el 35% dijo que "mejor". Es el mismo porcentaje de expectativa que había en enero. Luego, había repuntando hasta 45 en abril, pero hubo una caída de 10 puntos y regresó al primer casillero. Y en este punto se destaca que el 53% dijo que en los próximos meses la capacidad personal de consumo y/o ahorro será menor a la del primer semestre de gestión Milei.
El relato de que al ajuste lo hará la casta está destruido: sólo lo sostiene el 12% de los cordobeses. 46% considera que las medidas la sufren los trabajadores y el 36% opina que al esfuerzo lo hace la clase media. Y en lo que es una luz de ventaja para Llaryora, empieza a consolidarse la idea de que el responsable del aumento de tarifas en Milei: la mitad de los cordobeses identifican en ese rol al Estado nacional.
Cuando consultaron cuál es el principal problema de la economía, y tal como se advierte en otros estudios, la inflación quedó relegada: el 39% considera que los bajos salarios y el 28% la inflación. Otra punto interesante: la inflación preocupaba al 37% hace sólo un mes. En ese contexto, la pobreza empieza a colarse en la discusión política y preocupa al 16%, 4 puntos más en relación a abril.
Respecto de la imagen: Milei mantiene el liderazgo, con 56% de positiva y 42 de rechazo; los mismos porcentajes que Patricia Bullrich, quien aumentó su imagen negativa en 3 puntos. Sigue siendo la gran ventaja para Milei el alto rechazo en Córdoba a las figuras de Mauricio Macri (-54%), Áxel Kicillof (-60%) y Cristina Fernández (-69%).
En el caso de los cordobeses, Juan Schiaretti sobresale con una imagen positiva de 60 puntos. Llaryora ronda los 46 puntos de aceptación, Luis Juez tiene 45 y Rodrigo de Loredo ronda los 35. La principal ventaja por ahora para Llaryora es que su negativa es idéntica a la positiva, mientras que Juez y De Loredo tienen mayor rechazo que aceptación. Sin embargo, y no menor, Llaryora está sufriendo un fuerte desgaste en los primeros seis meses por la sucesión de errores políticos y de inconsistencias en la gestión.
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Y sí, si ahora tenemos una de las tasas de inflación más bajas del mundo estando en el 4,5% mensual, similar a la que teníamos con el ministro de economía de Macri Martín Guzmán hace un par de años. Y la pobreza no debe preocupar porque de la pobreza se sale trabajando y no pidiendo comida y planes sociales.