Los resultados de las encuestas "pueblo por pueblo" están sobre las principales mesas del peronismo cordobés. El resultado es claro: Martín Llaryora, el candidato que tendrá la misión de suceder a Juan Schiaretti, tiene que recuperar terreno en varios lugares del interior provincial, donde su figura tiene un menor conocimiento que la de Luis Juez, de presencia permanente en canales de la televisión porteña.

Con esa premisa, Llaryora saldrá desde este fines de semana a recorrer las principales ciudades del interior. No será campaña lisa y llana, sino que buscará "marcos institucionales" para disimular la maniobra, pero el desafío es el mismo: "Que Martín y su gestión sean conocidos en el interior", confiaron cerca del intendente capitalino.

Estas giras encabezadas por Llaryora se enfocarán en intendentes, sociedades ruralistas, clubes y empresas, y tendrán como anabólico la participación de los ministros de Schiaretti, según sea el área. "Habrá un claro mensaje de continuidad del proyecto político exitoso que inauguró De la Sota y continuó Schiaretti", indicaron desde la Municipalidad capitalina.

En el Gobierno provincial hay entusiasmo: luego de la tensión generada por el fallido recital de Ulises Bueno, una cumbre entre el intendente y el gobernador ordenó la tropa. Allí se enterraron las "juntas promotoras" con las que el llaryorismo quiso posicionar a su jefe. En ese marco, un alto funcionario provincial lee que, además de la continuidad, hay un mensaje de reparto del poder en cuotas territoriales: "Llaryora es el mejor candidato, pero no es aún el jefe del PJ", es la síntesis.

 Primeros signos de tensión entre Llaryora y Schiaretti por la campaña

Con esta nueva estrategia en marcha, la orden directa ya bajó a los ministros de parte del gobernador, así que habrá asistencia perfecta en cada gira de Llaryora. En general, los ministros también son caciques territoriales. "Las recorridas 'conjuntas' por el interior comenzarán este fin de semana, y está la orden de ajustar la agenda de los ministros con la de Llaryora", confiaron en El Panal.

Con este esquema, Llaryora compartirá protagonismo con los ministros, que son también los jefes políticos de sus respectivos departamentos. Sergio Busso, de Agricultura, también es el referente político del sur provincial; Eduardo Accastello, de Industria, comparte el liderazgo con Martín Gill en el departamento General San Martín, en la cuenca lechera; Facundo Torres, de Gobierno, conduce el peronismo de Villa María; Carlos Massei, de Desarrollo Social, arma y desarma en el sudeste provincial, por citar algunos casos.

Desde el Palacio 6 de Julio, admiten que Llaryora tiene un desconocimiento del 30 por ciento en los departamentos de la "zona núcleo", en el sudeste cordobés. Otras encuestas le dan un desconocimiento superior, cercano al 40 por ciento. Analizan que allí corre con ventaja Juez por la penetración de canales como La Nación y TN.

El epicentro político de esa región es Marcos Juárez, donde el próximo 11 de septiembre habrá un mano a mano entre el peronismo aliado al vecinalismo y Juntos por el Cambio. "Apostamos a ganar con contundencia y descartamos que en el palco de esa noche estarán Schiaretti y Llaryora", agregaron en la Municipalidad capitalina. En El Panal hay una lectura similar: Marcos Juárez será el inicio de la campaña.