El diputado macrista Alejandro Finocchiaro y el radical Rodrigo De Lorado se trenzaron en una escandalosa discusión, atribuyéndose mutuamente haber faltado a la verdad.

La acalorada pelea se desató antes que 152 legisladores aprobaran el emplazamiento de las comisiones para discutir incremento de recursos a las universidades y restitución del FONID, contra la resistencia de los 81 diputados que juntaban los libertarios y el macrismo.

Los pases de factura ya habían trascendido entre el bloque de PRO y la UCR, tal como informó LPO, pero el recinto elevó la temperatura del debate después que el oficialismo y la bancada liderada por Cristian Ritondo fracasaran en su intento por impedir el emplazamiento de las comisiones de Educación y Presupuesto, presididas por el propio Finocchiaro y su par José Luis Espert, para que se dictamine el próximo jueves sobre los expedientes referidos a la ampliación presupuestaria de los gastos operativos de las universidades.

En ese contexto, el ex ministro de Educación macrista dijo: "El diputado De Loredo faltó a su palabra". Ante el bullicio en el recinto, Finocchiaro repasó el chat donde tenía registrada la conversación con el jefe del bloque radical. "Sí, Ale", habría sido la respuesta que el cordobés le dio al legislador del PRO cuando lo sondeó el viernes pasado, cerca de las 19, para saber si abortaría el pedido de sesión especial si existía el compromiso de despachar los expedientes sobre el sistema de educación superior el jueves 23 de mayo.

Según Finocchiaro, la sesión era "ridícula, ignominiosa, desprolija y grave". Mientras hacía uso de la palabra, buena parte de la bancada de Unión por la Patria le reclamaba a Martín Menem que permitiera la votación de las mociones en vez de cederle la palabra al diputado macrista. El más enfático era el ex titular de la AFIP, Carlos Castagneto pero la que más irritó a Cristian Ritondo fue la legisladora Paula Penacca, que le reprochaba al riojano que ignoraba el reglamento. "¡Callate!", vociferaba Ritondo contra la diputada camporista desde la otra punta del recinto.

La gravedad a la que aludía Finocchiaro residía en que, a su criterio, "se le está dando la oportunidad al kirchnerismo de mostrar cuánto le preocupa la educación, cuando su brazo sindical el jueves va a dejar sin clases a todos los chicos del país". "El verdadero objetivo del kirchnerismo es emplazar para que se trate el FONID", protestó.

Automáticamente, la ex presidenta de la Cámara Baja Cecilia Moreau celebró la conjetura. "¡También!", exclamó, al tiempo que Castagneto repetía que Finocchiaro le estaba diciendo ridículo "al que pidió la sesión", acaso caldeando los ánimos de la UCR.

Apuntando directamente contra el cordobés, Finocchiaro aseguró: "no solo tengo honor para mantener mi palabra sino que tengo coraje y hombría de bien para sostener mis dichos".

Cuando pudo responder, De Loredo apeló a una frase de la poeta francesa Marguerite Yourcenar. "En Memorias de Adriano, Marguerite Yourcenar define a la honorabilidad como el orgullo atravesado por la ética, no veo en las palabras de Finocchiaro de ninguna manera una actitud honorable", dijo.

Además, ensayó una veloz autocrítica en medio del recinto por haber integrado el gobierno de Cambiemos pero con la intención de criticar al legislador del PRO. "Ha llegado la hora de que haga público una de las autocríticas que tuve por haber integrado ese gobierno, que es el bajo nivel de su ministro de Educación", disparó, y agregó: "Queda claramente expresado por la carencia de educación en un hecho que, en mis años como representante parlamentario, fue pocas veces visto".

Finocchiaro volvió a pedir el uso de la palabra para responderle, luego que De Loredo insinuara que las conversaciones a las que el macrista les daba valor no ocurrían "durante el día y con la luz prendida". "Fue a las siete de la tarde", chicaneó el ex funcionario de Cambiemos.