En pocos minutos, Alberto Fernández logró disipar las dudas opositoras sobre su posicionamiento ante el conflicto bélico en Ucrania, que definió como una invasión de Rusia, frase que había utilizado este lunes el canciller Santiago Cafiero ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, pero la evitó en una entrevista con el diario Clarín y en los mensajes de Cancillería. 

Los legisladores de Juntos por el Cambio lo esperaban con banderas de Ucrania en sus bancas y una presión para que hiciera un minuto de silencio en homenaje a las víctimas. El diputado del PRO Gerardo Milman se lo dijo al oído cuando le tocó recibirlo en la explanada del Congreso y Mario Negri, el jefe de los radicales, quiso pedir la palabra para hacerlo en el recinto.

Levantó la mano ni bien Cristina Kirchner abrió la sesión, pero no le prestó atención. Empezó a los gritos cuando Alberto se sentó en el estrado, pero pronto el presiente le pidió calma. "Si me deja empezar", le sugirió. 

Juntos exige al Gobierno endurecer la postura contra Rusia y pide interpelar a Cafiero

La vice le marcó el momento de pedir el minuto de silencio y lo hizo. Y ni bien empezó el discurso, se sacó el tema del encima sin frases ambiguas. "Vemos con pesar que tanto dolor y tanta muerte no han logrado conmover la ética de los poderosos que encerrados en la lógica de un capitalismo financiero que busca perfeccionar su renta, solo logra profundizar aquella desigualdad", introdujo.

"En ese contexto, la paz del mundo se altera por la invasión militar de la Federación de Rusia sobre Ucrania. Europa se conmueve mientras el fantasma de una guerra vuelve a levantarse. Otra vez la violencia bélica arrasa vidas humanas", fue su definición. 

"Si el mundo no comprende que es este el momento preciso en que debemos darle una oportunidad a la paz y que debemos construir nuevas reglas que saquen de la postergación a los millones de desposeídos que apenas sobreviven, otra vez la humanidad estará siendo condenada a padecer la indecencia de los poderosos".

"Argentina es parte de ese mundo y no puede escapar al contexto en el que está inmersa. La guerra, en un mundo que se ha globalizado, indefectiblemente genera consecuencias sobre nuestro país".