El radicalismo se aleja del PRO en la Ciudad y en la UCR exploran un acuerdo con Horacio Rodríguez Larreta. El ex jefe de Gobierno no quiere saber nada con sumar dirigentes de otros partidos.

Tras dos elecciones como parte de Juntos, el radicalismo se abrirá del PRO. Desde el angelicismo y cerca de Yacobitti-Lousteau aseguran que la UCR porteña se mantendrá unida y por el momento competirán en soledad.

En el larretismo buscan "nitidez" y eluden cualquier tipo de alianza partidaria. "El principal activo de Horacio es la gestión. No buscamos acuerdos políticos, la experiencia nos demostró que suman poco y limitan a la hora de hacer política", dijo a LPO uno de los armadores del ex jefe de Gobierno. Aún no está definido si competirá en las elecciones locales o las nacionales.

En una cruzada por alejarse de la casta, Larreta busca mostrarse como el candidato de a pie en las próximas elecciones. En la UCR tomaron con sorpresa su postura: lleva más de 3 décadas dedicado a la política y no se explican cuál es el problema de ser un político profesional.

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En el radicalismo dicen que Larreta y Lousteau tienen un electorado muy similar y que si van por separado no llegarán a los dos dígitos. "No podemos canibalizarnos los votos", explican para justificar el acercamiento al ex candidato presidencial.

En el centenario porteño no descartan sumar al socialismo y al ocañismo y reeditar la alianza de 2015 aunque sin la Coalición Cívica.