Juntos por el Cambio terminó acordando un piso del 20% en la Ciudad para incorporar a los legisladores y comuneros de las distintas listas. Fue la solución que encontraron para contentar a Jorge Macri, que reclamaba un 30%, y al radicalismo, que pedía mantenerlo en 15%.

El cierre de alianzas del oficialismo porteño mantuvo a todos los partidos que se incorporaron en 2021. El único ausente será Republicanos Unidos, la fuerza de Roberto García Moritán, pero no hubo veto: enfrascado en una interna con Ricardo López Murphy, le legislador no logró que la convención de su partido aprobara el ingreso a Juntos. De todos modos no está descartado que el marido de Pampita pueda incorporarse como candidato.

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Como explicó LPO, la demanda del jorgemacrismo parecía excesiva. En Juntos calculan que en agosto pueden llegar al 45 o 50% de los votos totales. Con esos números, para un piso del 30% un candidato debía reunir al menos entre 13.5 o 15% de los votos totales para entrar en el reparto de legisladores y diputados.

El radicalismo, con Emiliano Yacobitti y Daniel Angelici a la cabeza, quería un piso del 15%, la cifra acordada en 2019 y que también rigió en 2021. Un piso bajo resulta más atractivo para fomentar la participación de partidos más chicos.

Por estas horas la principal misión de Jorge Macri es hacer desistir a Ricardo López Murphy de su candidatura. Las estimaciones varían según el interlocutor: el economista podría obtener entre 10 y 16 puntos en la interna de Juntos.

Esos números dejarían al actual diputado afuera del reparto legislativo, pero podrían ser definitorios a la hora del recuento de votos, sobre todo porque comparte la misma franja electoral del ex intendente de Vicente López.

"A Ricardo no le importa tener uno o dos legisladores menos. Lo que quiere es instalarse y posicionarse. Va a ser difícil bajarlo", especuló uno de los armadores de Juntos.