Nicolás Massot

“Si no resolvemos la crisis energética, la factura de gas se seguirá pagando con pan y leche”

“Lo que no pagamos en gas subsidiado, lo pagamos de inflación”, afirma el jefe de bloque de Cambiemos.

Dice que después del fallo de la Corte Suprema que frenó el tarifazopara los usuarios residenciales al gobierno le quedan dos opciones: volver a lareceta kirchnerista o endeudarse para pagar gasto corriente. Con 32 años,Nicolás Massot es el jefe de la bancada de Cambiemos en la Cámara de Diputadosy uno de los voceros del oficialismo. Asegura que en 2017 el gobierno va abajar la inflación al 17 % anual, sostiene que Argentina vive una crisis políticasistémica y que todo en la política tiene que ver con el 2001. Opina que elregreso de Cristina Kirchner no le conviene al país y considera que Cambiemos yel peronismo –hermanados por el pragmatismo- van a ser los dos grandes polos dela política por mucho tiempo. Además, habla sobre la última dictadura y afirmaque la causa de los derechos humanos “es intocable”.

Alfonso Prat Gaydijo que si la Corte le ponía freno a los aumentos se paralizaba la obrapública. ¿Qué va a hacer ahora el gobierno?

Hay que entender lo que vino pasando. Una cosa era el período de2003-2007 donde los subsidios eran necesarios socialmente y además habíasuperávit. Era una decisión legítima de asignación de partidas presupuestarias.Después, la inflación subió, la necesidad social se convirtió en necesidadelectoral y los subsidios fueron creciendo desenfrenadamente. El déficit fiscalse disparó por el monto de los subsidios y porque además el esquema deprivatización de los servicios públicos, con subsidios, eliminó la inversión.Dejamos de producir y empezamos a importar con una cuenta cada vez más alta endólares. Desde 2006, 2007, lo que no pagamos en la factura del gas lo pagamoscon la inflación del supermercado. Aranguren lo dijo claro en Diputados: el 10por ciento más rico de la sociedad fue el que más subsidios recibió. Lofinanciamos con inflación ¿Y a quién le pega la inflación? Al 10 por ciento máspobre. El 70 % del déficit es la energía (los subsidios y la importación), osea que resolver la crisis energética es el 70 % de la solución para lainflación.

Pero ahora lasolución va a tener que ser otra.

Si no resolvés la crisis energética vía readecuación tarifaria, noqueda otro camino que continuar con la receta kirchnerista de una inflaciónpermanente donde la factura de gas se paga con el pan, la leche y el aceite. Oir a un nivel de endeudamiento insostenible porque una cosa es endeudarse paraobra pública que genera crecimiento y otra cosa es endeudarse para pagar gastocorriente como es el subsidio. No hay otra salida.

Durante años lasempresas recibieron subsidios y no invirtieron. ¿Cuál es el compromiso deinversión que asumen ahora?

Si no resolvés la crisis energética vía tarifas, no queda otro camino que continuar la receta kirchnerista de inflación permanente, o ir a un endeudamiento insostenible para pagar los subsidios.

Necesitamos normalizar las tarifas para que las empresas puedanaunque sea cumplir con la inversión en mantenimiento. No sólo hay falta deinversión en exploración y en generación de energía sino que ni siquiera sepudo mantener la inversión en infraestructura. El primer paso es que lasempresas puedan volver a invertir en mantenimiento y el Estado deberá seguirpor un tiempo –como lo hizo en los últimos años- invirtiendo directamente en generación deenergía.

¿No es unescenario donde las empresas siempre ganan? Antes porque las subsidiaba elEstado y ahora con el aumento que pagan los usuarios.

Antes también lo pagaba la población, a través de la inflación.

Víatransferencias de subsidios estatales.

Sí, pero no eran transferencias del Tesoro. El Estado no tenía laplata para subsidiar y el salario se depreciaba al 30 % anual. Yo entiendo laangustia del que recibió aumentos irracionales. Pero la peor angustia de losargentinos es no saber cuánto va a valer su salario el mes que viene. Eso es loque hay que terminar en la Argentina y eso es lo que destruye la inversión. Notener previsibilidad. Nosotros se la tenemos que volver a dar a la gente y a losinversores, a los que mueven la economía y a los que generan trabajo. Elesquema donde ganaron las empresas fue el esquema de corrupción con lossubsidios kirchneristas: el de Jaime y De Vido, donde utilizaron los subsidiospara beneficiarse a ellos y a las empresas de sus redes de enriquecimientoilícito.

¿Los empresariosle están dando al gobierno el respaldo que esperaba?

Hay que acostumbrarse: los empresarios no están para apoyarpolíticamente. Los empresarios están, en este caso, para generar serviciospúblicos de manera más eficiente de lo que lo podría hacer el Estado. Antes quetener concesionarios quebrados -que no tienen dinero ni para generarmantenimiento- era preferible estatizar.

Con algunas lohicieron.

Con las menos. Les resultaba más beneficioso mantener este sistemaextraño de subsidios cruzados financiados con inflación. Nosotros queremos quelas empresas gerencien de manera eficiente y el Estado va a estar ahí paraexigirles a través de los entes de control, que también van a ser regularizadospara que vuelvan a ejercer la presión sana para que se brinde un buen servicio.

Cambiemos y el pragmatismo

Hay un discursooficial que se prolonga: estos son los peores meses del gobierno. ¿Cuándo setermina el peor momento?

La readecuación tarifaria es la manera de empezar a salir de lainflación. Son meses difíciles porque todavía coexiste la readecuacióntarifaria con una inflación que empieza a bajar, pero todavía es alta. El añoque viene a esta altura, no tengas duda, la inflación no va a ser un problematan acuciante como es hoy. Ya estamos en niveles por debajo del 2 por ciento,vamos a acercarnos al 1,5 mensual a fin de año y vamos a empezar 2017 con unameta bien cumplible del 17 % anual, algo que hace años no se logra enArgentina.

Dijo antes delfallo de la Corte que el ajuste en las tarifas es gradual y hay economistas quecreen que esta es la etapa keynesiana del gobierno. ¿Hacia dónde quiere irCambiemos?

Dentro de Cambiemos hay muchos que no se sentirían cómodos ubicados en la derecha. Cambiemos nace más como una amalgama de valores de honestidad, profesionalismo y eficiencia en la gestión, que con una plataforma programática común.

El ajuste está siendo gradual. Lo que pasa es que fue tan calamitosoel estado de las cuentas públicas que se recibió, tanto mayor el gasto que losingresos que lógicamente lo gradual parece mucho. La experiencia del PRO en laciudad de Buenos Aires ya dio por tierra con el prejuicio de que era un partidoque no atendía lo social. La paradoja fue que Macri terminó gobernando para lasclases donde menos adhesión tenía. Por eso terminó ganándole al peronismo en elsur de la ciudad y en las villas miseria. Esto va a continuar a nivel nacional.Acá lo que hay que desmentir es que veníamos de un gobierno nacional y popular:nacional y popular no era subsidiar las tarifas en Recoleta y en Puerto Maderocon expensas de 30 mil pesos, no era subsidiar a la gente que viaja al exterior.

¿Cómo definiríaa Cambiemos en términos ideológicos y en cuanto al rol del Estado?

Es difícil porque por primera vez en la historia accede al poder un partido queno es uno de los principales dos partidos de masas de la Argentina. Yespecialmente porque el PRO y Cambiemos nacen mucho más con una amalgama devalores, de transparencia, honestidad y profesionalismo en la gestión que conuna plataforma programática común. Este no es un partido que ponga por delanteuna plataforma ideológica: pone por delante la excelencia en la gestión, laidoneidad y la transparencia en la función pública de todos sus funcionarios. Hayuna gran heterogeneidad.

¿La derecha concorazón como dice desde la jefatura de Gabinete Hernán Iglesias Illa o ungobierno que tiene menos corazón que Pinocho como dice Pablo Moyano?

Dentro de Cambiemos, hay muchos que genuinamente no se sentiríancómodos ubicados en la derecha. Estamos lejos del fin de la historia pero hanquedado viejas las categorías en todo el mundo y en Argentina además hemossufrido una tremenda crisis de representación de los partidos políticos. Hoytenemos una vuelta a un bifrentismo, no a un bipartidismo. Es tan difícildefinir en cuatro o cinco palabras a Cambiemos como al peronismo, que ha mutadoa lo largo de su historia de extremo a extremo. Son los dos grandes polos de lapolítica argentina y creo que lo van a ser por mucho tiempo.

Así como algunospiensan que el kirchnerismo no hubiera existido sin el 2001, otros dicen queCambiemos también es producto del 2001.

Todo en la política argentina tiene que ver con el 2001. Explotaronlos dos grandes partidos, el peronismo se dividió en tres, el radicalismotambién. Nutrido principalmente por gente independiente pero también por gentedel peronismo y del radicalismo, surge Propuesta Republicana (PRO). Hoy las distintasvertientes del PJ, incluyendo al kirchnerismo, empiezan a buscar unaconfluencia. Hoy el peronismo gobernante en las provincias empieza a absorberlas expresiones de lo que fue el Frente para la Victoria. Desde el otro lado,Cambiemos ha logrado una exitosa amalgama de partidos que expresan un corte másrepublicano, más institucionalista y menos populista que el último peronismo.

¿El peronismo esaliado, es socio en la gobernabilidad o es adversario?

Si hay 16 gobernadores del peronismo, la gente nos pide quetrabajemos con ellos y en ese sentido por supuesto que son socios. Siempre elpresidente está llamado a ser socio de los gobernadores y los gobernadores delos intendentes. Electoralmente, apostamos al largo plazo de Cambiemos.

De Lilitaa Cristina

Dice que latransparencia y la honestidad son marcas del nuevo gobierno. Sin embargo,Carrió cuestiona por esos temas a Nicolás Caputo, Daniel Angelici, Néstor Grindettiy Pablo Bressi.

Ser transparente y ser honesto no significa que uno esté exento denada. Significa que uno no se acostumbre ni encubra. Lo de Bressi produjo unapreocupación, una reunión con la gobernadora y un compromiso de constatar loque Carrió denunciaba. Lo importante es la actitud. La crisis políticaargentina es sistémica y la tenemos que resolver entre todos. No va a ser unarevolución, va a ser un cambio gradual. Este es un gobierno que tieneautocrítica, que corrige, que no miente y eso es muy chocante comparado con elpasado reciente del kirchnerismo. Esconder, encubrir, nunca tener autocrítica ysiempre ir para adelante obstinadamente, esas son cosas que en Cambiemos no lasvan a ver.

El blanqueo responde al pasado, cuando el Presidente dice "se acabó la joda" habla del futuro. la idea es que no tengamos que repetir un blanqueo.

¿Cómo se conjugala frase de Macri “se acabó la joda para todos” con el blanqueo de capitales que impulsa el gobierno?

Lo que pasa es que el blanqueo de capitales responde al pasado endefinitiva. Cuando el presidente dice se acabó la joda para todos, estáhablando del futuro. La idea es que no tengamos que repetir un blanqueo. Lotenemos que hacer porque una sucesión de fracasos en la política argentinallevaron a que hoy hay 300.000 millones de dólares de los argentinos en negrodentro o fuera del país. Es la primera vez en la historia que un gobierno llegay premia a los cumplidores y eso no es una joda. Los que no lo hicieron tienenpenalidad.

¿Cree que elregreso de Cristina Kirchner -que parece retomar un ritmo de campaña- leconviene al gobierno de Cambiemos? ¿O puede generar un eventual problemaelectoral?

El regreso de Cristina no le conviene al país. Está en todo suderecho a hacerlo pero jamás voy a decir que nos conviene alguien que fomentala división y la provocación. Como oficialismo, debemos saber que nos vamos air y también cooperar para que lo que venga sea mejor.

Los derechos humanos 

El presidente hablóde “guerra sucia”. Su tío, director de La Nueva Provincia, apoyó a la dictaduray está denunciado por delitos de lesa humanidad. ¿Cuál es la posición deCambiemos sobre el terrorismo de Estado?

Hay temas tan profundos como este, en los que cuesta unificar unaposición. El Frente para la Victoria le ha traído a la Argentina un modelo dehacer política de causas nobles con objetivos perversos. La causa de losderechos humanos es intocable. El problema que ha tenido el Frente para laVictoria con los derechos humanos es Hebe de Bonafini, Schoklender y SueñosCompartidos y la utilización que han hecho de una causa tan noble. Ahora, esono la mancha y esa causa está ratificada por el propio presidente y por todo sugobierno. Eso ya está en el marco de la Justicia y son los jueces los que debenavanzar o no avanzar en todas las causas abiertas. Quienes pertenecemos a unageneración que no vivió esa época, en mi caso ni siquiera había nacido, debemosayudar a superar esa etapa y superarlo no es para nada el olvido. La superaciónimplica la Justicia, viene después.

Malcorra diceque no hubiera utilizado el término “guerra sucia” –lo usaba la dictadura- yque hubo un enfrentamiento asimétrico. ¿Expresa a Macri?

Expresa la heterogeneidad de la que hablo. Son temas difíciles y vasa encontrar conceptos diversos, como lo sería la discusión sobre una ley quelegalice el aborto o el consumo de estupefacientes. Puede haber una diferenciaen el léxico, pero no hay ninguna duda del compromiso del gobierno con losderechos humanos, vistos integralmente y honestamente, que fueron dos cosas queel kirchnerismo no tuvo.

La causa de los derechos humanos es intocable, debemos ayudar a superar esa etapa, pero superar no es olvido es Justicia. Yo creo que no hay nadie que se anime a defender el accionar del gobierno militar.

Hoy hay jueces que conceden la prisión domiciliaria para los represores y elgobierno anticipa que no va apelar. ¿Cambiemos asume la teoría de los dosdemonios?

Que la relación de fuerzas fue incomparable es una obviedad, queutilizar el Estado para cometer determinados delitos es mucho más grave lo dicela Justicia y las causas han avanzado con esos agravantes. Yo creo que no haynadie que se anime a defender el accionar del gobierno militar.

Cada vez quehabla del tema, el presidente genera rechazos.

Creo que también hay una utilización mediática de este tema.Preguntar sobre las cifras de los desaparecidos no cambia en la gravedad, en elfondo de la cuestión, en la naturaleza del delito. El terrorismo de Estado esel delito, es un delito de lesa humanidad y por eso los están juzgando. ¿Dondeestá la discusión?

Lo último. ¿Creeque la despenalización del aborto puede ser un tema que se discuta en el Congreso?

Es un tema de discusión casi todos los años o cada dos años, hacemucho. Yo creo que sí, de hecho hay proyectos, no tengo duda que va a ser untema de discusión. Y como cualquier otro tema vamos a estar abiertos adiscutirlo. Después será trabajo de los legisladores ver si prospera y de quéforma. Pero si, creo que es un tema que cada vez viene con más fuerza.

¿Ustedpersonalmente?

Personalmente estoy a favor de la vida, dispuesto por supuesto aescuchar las particularidades, pero mucho más inclinado a trabajar por laprevención de casos específicos donde mucha gente los impulsa que tomar elatajo de legalizar esta práctica. Pero creo que es una discusión que nadie lava a dar en términos de todo o nada.