Crisis en el banco Finansur por el impacto del caso Cristóbal López
Finansur es un banco especializado en créditos para empresas pyme construido por el banquero Jorge Sánchez Córdova. En 2012 el empresario kirchnerista Cristóbal López adquirió el 70% del capital societario por aproximadamente 125 millones de dólares. Recién en 2015 el Banco Central aprobó la operación.
Sin embargo, la negativa de Sánchez Córdova a ceder el control, sumada a la inexperiencia del empresario K en el sector, hizo que el banquero siguiera al frente de la institución pese a no ser el accionista mayoritario. De todos modos, López nombró directores de su holding empresario, el Grupo Indalo S.A. en el directorio del banco.
El grupo creció al abrigo de Oil Combustibles, hoy bajo la lupa de la justicia sospechada de quiebra fraudulenta. Es que luego de que la AFIP reclamara a Cristóbal López los 8.000 millones de pesos que Oil le adeudaba, el empresario la declaró en quiebra para evitar el pago y hoy esta empresa se encuentra en concurso de acreedores.
La última medida del juez federal en lo Contencioso Administrativo Esteban Furnari prohibe la fragmentación del Grupo Indalo hasta tanto se cancele la deuda con la AFIP y entendió que con la división del Grupo existe "un riesgo cierto e inminente" de que se insolvente y sus accionistas logren evitar el pago a la AFIP.
Esto trajo intranquilidad a algunos clientes del banco. LPO pudo saber de una alta fuente bancaria que algunos evalúan retirar sus depósitos por temor a que el banco se vea impactado por la crisis del Grupo Indalo. Lo curioso del Finansur es que solo diez depositantes concentran casi el 50% del segmento. Y aunque sean inversiones a plazo, a los más chicos, esto no los deja tranquilos. Por eso en el mercado hablan de una corrida contra Finansur, que fue desestimada por las fuentes del Central que consultó este medio.
Mariano Recalde, Wado de Pedro y Santiago Carreras.
LPO supo que el capital accionario de Finansur no puede ser tocado. Una fuente del Banco Central dijo a LPO que, para blindarse de la desconfianza, el CEO Javier Sánchez Córdova se adelantó y le pidió la renuncia a los miembros del directorio vinculados a Cristóbal López: Fabián de Sousa y Nicolás Cevela. Sin embargo, Juan de Elizalde continúa en su cargo para ordenar la salida.
Pero el dato político más delicado es la incorporación en su momento de Nicolás Cevela. Este director entró al Finansur como hombre de Fabián de Sousa, mano derecha de Cristóbal López. Pero en realidad, fuentes al tanto de la operación del banco, confirmaron a LPO que Cevela es hombre del camporista Wado de Pedro y Lilita Carrió lo viene investigando porque cree que es la punta de la ruta del dinero de la agrupación de Máximo Kirchner.
Además agregó que la situación del banco es sólida, aunque reconoció que temen por el impacto que la desconfianza tenga sobre sus cartera de clientes. Desde que estalló el tema Cristóbal López las reuniones con inversores y clientes son frecuentes para mitigar dudas.