Deficit

Tensión en Economía porque en febrero creció nueve veces el déficit

Febrero tuvo una escalada récord frente a un enero austero. Prat Gay festejó porque Kicillof gastaba más.

El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, recurrió a la vieja práctica de la contabilidad creativa y al anunciar los nuevos números de la situación fiscal eligió presentarlos de manera "bimestral" para disimular que tras el buen resultado de enero, en febrero el rojo de las cuentas públicas volvió a dispararse.

En un comunicado titulado "El Gobierno reduce el déficit fiscal primario un 16,4% en el primer bimestre de 2016", el Ministerio celebra la reducción del exceso de gasto frente al despilfarro de Kicillof. Sin embargo, en esta presentación agrupada de los datos buscaron enmascarar el pobre resultado fiscal de febrero mezclándolo con la enorme reducción del déficit lograda en enero, explicada sobre todo porque se cortaron prácticamente todos los pagos del Estado, provocando decenas de miles de despidos en la obra pública.

El informe destacó que "el sector público nacional registró un déficit primario de 17.925 millones de pesos, una mejora de 3.508 millones respecto al primer bimestre de 2015". Pero obvió mencionar que el resultado de febrero fue, partiendo de los mismos números del Gobierno, $1.714,3 millones (11,2%) peor respecto de igual mes del año pasado.

Prat Gay cayó en la contabilidad creativa de sus antecesores y para disimular el regreso del rojo fiscal fuerte de febrero, presentó los datos mezclados con los de enero, que dio mejor.

El mes anterior, la mejora había sido del 90,5% mayoritariamente por una fuerte caída en el consumo público, que como explicó LPO, se debió a la revisión de gastos y paralización de pagos de obra pública. Y aunque también se felicitaron en enero por el logro, no era un número realista. La suspensión de los pagos es insostenible. Por eso, y por el aumento de otros rubros vinculados a la seguridad social y a los salarios, el déficit en febrero volvió a trepar.

En enero, el balance del Sector Público Nacional había arrojado un déficit primario sin rentas de $548 millones. Y en febrero, resultó en un rojo de $17.377,3 millones sin rentas, es decir contabilizar los ingresos recibidos por rentas financieras del Banco Central (BCRA) ni los del FGS (Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses) ni los egresos por el pago de intereses de la deuda pública.

Puntualmente, en febrero los ingresos primarios se incrementaron un 25,6% contra una suba del gasto de 23,2% respecto de igual mes del año anterior. "En febrero el incremento interanual de los ingresos primarios se explica básicamente por las subas en los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social y los impuestos al Valor Agregado y a las Ganancias", explicaron desde la cartera que conduce Prat Gay.  

Por el lado del gasto, el Ministerio explicó que "algo más del 83% de su variación se produjo por las mayores erogaciones en solo 2 conceptos: 1) 'Prestaciones de la Seguridad Social', debido al ajuste bianual aplicado en estos haberes por ley de movilidad y por el incremento de beneficiarios debido a la moratoria previsional y, 2) 'Remuneraciones', en gran medida por los incrementos salariales otorgados en todo el ámbito del Sector Público Nacional". O sea, dos medidas totalmente previsibles y en el primer caso, obligatoria.

Odiosas comparaciones

Al incorporar al análisis el ingreso por rentas financieras recibidas del FGS y BCRA y descontados los servicios de deuda, el resultado financiero fue un rojo de otros $3.159,4 millones. En enero, el resultado financiero había sido de $1.649,1 millones. Por lo que febrero mostró en este punto también un empeoramiento del 91,6% respecto del mes anterior.

Así, el déficit total de febrero trepó a $20.536,7 millones. Y comparándolo con los de $2.197,1 millones de enero, el resultado fue un crecimiento del déficit de 9,34 veces. 

Así, de una mejora del 83,68% anual en enero pasamos a una mejora bimestral del 16,4% por el deterioro del déficit de febrero.

Prat Gay y el titular de la AFIP, Alberto Abad.

No obstante, al considerar los resultados de enero y febrero en forma conjunta, como en el informe oficial, efectivamente "el país registró un déficit fiscal global acumulado (que incorpora el ingreso por rentas financieras recibidas del FGS y BCRA y pagadas por servicio de intereses de la deuda) de $22.733,8 millones frente al resultado del mismo período en 2015 que fue de 29.856, lo que representa una mejora interanual de $7.121,9 millones".

Sin embargo, en el Gobierno en febrero se encendieron las alarmas por otro dato preocupante: La recaudación creció por debajo de la inflación una situación que si se vuelve tendencia agravaría y mucho el drama fiscal.

Por eso, como reveló LPO, se había resuelto lanzar este mes la quita de subsidios al gas y el transporte, pero la caída de Macri en los sondeos llevó al ala política a postergar la decisión. Pero ante el agravamiento de la situación de las cuentas públicas ya estaría tomada la decisión de hacerlo igual, como confirmó Macri en las entrevistas que dio el fin de semana.

Un rojo de 22.733,8 millones 

En estos dos meses, el Gobierno logró que los gastos subieran menos que los ingresos, pero aun así el déficit es voluminoso: Se acumularon casi $23.000 millones de nueva deuda.

Prat Gay sostuvo su compromiso de no financiarse mediante adelantos transitorios del Banco Central. No obstante, como se desprende de la planilla oficial, el Tesoro Nacional obtuvo $6.858 millones del FGS de la ANSES.

Por eso el 25 de febrero el Tesoro salió al mercado local con dos bonos, el Bonar 18 y el Bonar 20 para con los que recaudaron $11.900 millones. Y el 17 de marzo reiteró esta operatoria para hacerse de otros $15.300 millones.

El Gobierno nacional se fijó como objetivo cerrar 2016 con un déficit fiscal del orden de 4,8% del PBI. Este desfase entre ingresos y gastos buscará cubrirse en los próximos meses con emisión de deuda, una vez que se supere el conflicto con los holdouts. Pero sin el ajuste correspondiente la nueva deuda agrava el déficit porque abulta la cuenta de intereses a pagar.