Congreso

El Gobierno ratificó que no se cambiará el sistema de votación para octubre

Descartó proyectos sobre boleta única y electrónica en el Congreso. “No podemos cambiar ahora”, dijo Di Tullio.

El kirchnerismo reafirmó que el 25 de octubre se elegirá presidenta de la Nación con el sistema de votación tradicional, pese a las demoras en las primarias y los desmanes del fin de semana en Tucumán.

“Cambiar en el medio de un período electoral es una desprolijidad, es escandaloso”, respondió Juliana Di Tullio, jefa del bloque de Diputados, durante una sesión en la que la oposición exigió cambiar el histórico sistema electoral de boleta sábana.

Fue una hora más tarde de la reunión de todos los candidatos opositores para pedir cambios en el sistema electoral.

El método es cuestionado por la posibilidad de robar o esconder boletas de los cuartos oscuros y en las primarias tuvo ribetes ridículos, que prolongaron el escrutinio hasta las 8 de la mañana del día siguiente.

Es que el sistema de internas y la incorporación de categorías como parlamentarios del Mercosur por distrito único provincia obligó a imprimir miles de boletas con hasta un metro de largo.

Nada de esto conmovió al kirchnerismo. “Ustedes denunciaron fraude en Salta, que hubo boleta electrónica; y en Santa Fe, que hubo boleta única”, le dijo Di Tullio a los diputados del PRO, impulsores de un cambio inminente.

Fue el macrista Pablo Tonelli quien pidió preferencia para tratar su proyecto sobre boleta electrónica, que permite imprimir a los candidatos a elegir en una papeleta que luego se introduce en una urna. La misma máquina que imprime permite leer los datos y transmitirlos.

El santafesino Pablo Javkin, de la Coalición Cívica, solicitó considerar su proyecto sobre boleta única similar al de Santa Fe, donde se votan en urnas distintas por cada categoría a elegir.

Di Tullio avaló preferencias con dictámenes para alguna fecha que no precisó. En el mejor de los casos, se discutirá para 2017.

En el Senado no tuvieron mejor suerte los opositores que pidieron cambios. “El tema me apasiona pero hay que debatirlo. Sólo 6 países tienen voto electrónico”, los cruzó Juan Manuel Abal Medina. Y todo quedó para otro momento.