Córdoba.

El diputado que le hizo perder una banca a Macri antes de la elección

El presidente del PRO apeló una decisión de la justicia, pero terminó siendo perjudicado.

En la provincia de Córdoba se eligen nueve diputados nacionales, por lo que muy pocas veces el partido político o alianza ganadora se lleva más de cuatro bancas. 

De hecho, sólo lo logró la Unión Cívica Radical en 1985, 1987, 1989 y 1991 –años de alta polarización con el PJ-, y la alianza Unión por Córdoba–con el peronismo a la cabeza e incorporando a la tercera fuerza de entonces, la Ucedé- en 2001.

Para las elecciones de este año, la alianza Cambiemos (UCR, PRO y CC-ARI), la favorita en Córdoba, difícilmente puede alzarse con más de cuatro, porque los protagonistas de octubre serán, además de radicales y macristas unidos, el kirchnerismo, el peronismo cordobés y la izquierda.

Por eso, cuando se cerró la alianza opositora en Córdoba, la puja en la lista de candidatos a diputados nacionales fue por los primeros cuatro renglones.

Inicialmente, los radicales y los macristas intercalaron salomónicamente las cuatro bancas seguras.

Así, a la cabeza de la lista quedó el varias veces candidato Mario Negri (será su quinto período, todo un record en la provincia de Córdoba), segundo el presidente del PRO, Javier Pretto, tercera la mestrista Olga Rista y cuarto uno de los negociadores del macrismo, Nicolás Massot. 

A la Coalición Cívica-ARI, en homenaje a Elisa Carrió pero no por su caudal electoral en la provincia, se le asignó el quinto lugar para Leonor Martínez Villada; una candidatura casi testimonial.

La candidatura de Rista es consecuencia del cupo femenino. Esta ex periodista ascendió de concejal (2007-2011) a legisladora provincial (2011-2015), y ahora a diputada nacional (2015-2019) por la sencilla razón de que al radicalismo, y al mestrismo en particular, le faltan dirigentes mujeres.

En la UCR cordobesa las mujeres son pocas pero ruidosas. La fallecida María Teresa de Morini solía protestar por la ubicación de las damas en las listas. Siempre peleó porque estén lo más arriba posible.

Una de sus seguidoras hizo lo mismo ahora ante la Justicia Electoral Federal reclamando que como la UCR renueva dos bancas, Olga Rista debía ir segunda.

La Justicia le dio la razón y el orden de la lista de Cambiemos varió: Negri, Rista, Pretto y Massot. Nada grave, en definitiva, porque los cuatro primeros son los seguros, y mucho más los tres de arriba.

Pero Pretto no estuvo de acuerdo y apeló. La Justicia analizó la apelación y concluyó que, por tratarse de una alianza, y no sólo de la lista de la UCR, podía darse la razón a Pretto. Y el macrista volvió al segundo lugar. 

Pero en el reordenamiento que dispuso la Justicia, se dispuso que mal pudiera haber una mujer entre los cuatro primeros, por lo que Martínez Villada fue ascendida al cuarto lugar y Massot descendido al terrible quinto renglón.

Ahora, gracias a la iniciativa de Pretto, el PRO tendrá que sacar el 50 por ciento de los votos, polarizando con un solo rival, para que Mauricio Macri reciba de Córdoba los dos diputados nacionales que quería.