Provincia

Insaurralde y Granados apoyan a Julián Domínguez y acorralan a Aníbal

Desayunaron juntos esta mañana en La Matanza. Se perfila el equipo de los intendentes K.

Martín Insaurralde y Alejandro Granados blanquearon su apoyo a la fórmula bonaerense de Julián Domínguez y Fernando Espinoza, con una foto y un desayuno esta mañana en La Matanza.

La pelea entre el titular de la Cámara de Diputados y Aníbal Fernández, que encabeza la otra fórmula K para la Provincia, ya es una escalada de tensión política imparable. 

Domínguez, fuerte en el interior bonaerense, busca sumar a los caciques del Conurbano para acorralar al jefe de Gabinete, que lleva de compañero a Martín Sabbatella, enfrentado a los jefes comunales peronistas. 

Luego del desayuno, los candidatos se dirigieron a San Martín, a participar de un acto junto a Daniel Scioli y Gabriel Katopodis, quien pareció así ubicarse en la interna peronista. También están en diálogo con Darío Giustozzi, de Almirante Brown.

Espinoza, Domínguez, Katopodis, Scioli y el padre Pepe en San Martín.

La idea es que los jefes comunales del peronismo jueguen con esta lista. En ese sentido ya se pronunciaron Alberto Descalzo (Ituzaingó) y Julio Pereyra (Florencio Varela), además de varios intendentes del interior. Al lanzamiento de la fórmula, en un café de San Justo, llegaron también Hugo Curto (Tres de Febrero) y Mariano West (Moreno). 

Cuentan también con el respaldo del barón de Merlo, Raúl "Vasco" Othacehé, de buena sintonía con el líder de La Matanza.

El dato político de hoy es la definición de Insaurralde y Granados, la mano derecha de Daniel Scioli en el Conurbano. Los armadores de esta lista razonan: "Si tenemos La Matanza y Lomas, no hay nada más que discutir". Es que ambos distritos suman algo más de un millón y medio de electores. 

El esposo de Jésica Cirio había sellado un buen acuerdo con Espinoza, y hasta se mostraron juntos en el último tramo antes del cierre de listas, pero mantenía distancia con el oriundo de Chacabuco. Con esta foto, sella sin embargo su visto bueno por esta fórmula, un dato que esperaba gran parte del peronismo bonaerense. 

Se trata junto a Granados de dos pesos pesados del Conurbano, que no aparecían hasta ahora con un pronunciamiento de este tipo. 

Aníbal salió a dinamitar en los últimos días la alianza de sus competidores con los intendentes. Denunció que Domínguez y Espinoza presionan a los jefes comunales para que "escondan" su boleta. Y sugirió que sus rivales tejen esa maniobra porque están abajo en los sondeos. 

En el entorno de Sabbatella, por su parte, si bien admiten diferencias con un par de intendentes, relativizan esta supuesta parcialidad, y analizan que todos terminarán siendo ecuánimes, por órdenes de Cristina. 

Como sea, las fotos con los intendentes hablan por sí mismas y se sabe, el día de la elección, la última palabra la tienen los jefes del territorio.