Bronca en la Sexta por que Ottavis metió en la lista a un santafecino
La ambición de La Cámpora por meter diputados en las listas llevó en este cierre a colar a referentes de esa agrupación nacidos en otras provincias y con poco tiempo en el territorio bonaerense. Es el caso de Juan Manuel Pignocco que nació en Santa Fe y que llegó a la provincia hace pocos años para ser el secretario Administrativo en el Senado.
En rigor, no hay ilegalidad alguna en la inclusión del camporista, pero el malestar se propagó rápido en esa sección del sudoeste bonaerense. Es que la polémica es doble, por un lado Pignocco creció y vivió gran parte de su vida en Santa Fe y recién recaló en la provincia de Buenos Aires en 2011. Pero además, su domicilio actual es en La Plata y no tiene relación alguna con los distritos de la Sexta.
El recurso de colar senadores en listas de otras secciones no es monopolio de La Cámpora. El sciolismo ubicó a Alberto De Fazio, con domicilio en Quilmes en la lista de la Séptima (centro de la provincia). Lo mismo había hecho el massismo en 2011, cuando ubicó a Alfonso Coll Areco -oriundo de San Miguel- como candidato a senador por esa misma sección.
Pero en este caso, la situación de Pignocco generó revuelo por su condición de santafecino. Fuentes de la Legislatura recuerdan además que en 2013 fue candidato a diputado provincial por la Tercera Sección en noveno lugar.
El encargado de la operación fue su jefe político, José Ottavis. Es que el diputado provincial fue quien primereó a Mariotto en 2011 y le ubicó a Pignocco como secretario Adminstrativo. Así, Ottavis pudo controlar durante dos años los recursos del Senado. Más tarde el vice lo reemplazaría por alguien de su círculo más cercano. Hoy, Pignocco trabaja bajo las órdenes de Teresa Parodi, en el ministerio de Cultura de la Nación.
Pero la Sexta tiene un antecedente interesante. En 2009, Felipe Solá intentó colar en esa sección a su esposa María Helena Chávez. Al ahora candidato a gobernador le llovieron fuertes críticas y decidió bajar a su mujer luego de pedir disculpas públicas. En su lugar asumió entonces Verónica Couly, de Bahía Blanca.