Ciudad

Macri no renovará el convenio con el juego y abre un conflicto con Cristóbal

Anunció que no prorroga el convenio para los casinos flotantes y el Hipódromo. Se cae a fin de año.

Mauricio Macri tomó una de las decisiones más audaces de sus dos mandatos, justo cuando ingresa en el tramo decisivo de su campaña presidencial. 

A un mes del cierre de listas anunció que no prorrogará el convenio firmado en 2003 entre Nación y Ciudad que rige para los casinos flotantes y el Hipódromo de Palermo, dos concesiones de Cristóbal López.

La decisión tomó por sorpresa a los actores del juego, incluido el dueño del Grupo Indalo, que hasta aquí tenía una buena relación con el macrismo sobre todo a través de José Torello y Nicolás Caputo.

Los efectos prácticos de la decisión implican que a fin de este año el convenio que rige la actividad quedará sin efecto. 

En el gobierno porteño señalaron que como el convenio vence en diciembre próximo, la decisión de no prorrogarlo debe ser comunicada con 120 días hábiles de anticipación. 

Los fundamentos que comunicó oficialmente el gobierno porteño son el de "no comprometer a la próxima administración, la necesidad de consolidar la autonomía porteña y recuperar para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la totalidad de las potestades, competencias y recursos relacionados con el Juego".

En ese sentido, en el PRO se habla de un traspaso de las competencias de Lotería Nacional a la Ciudad, en caso de que Macri y Horacio Rodríguez Larreta triunfen en sus respectivas elecciones. 

Sugestivamente, hace pocos días la jefatura de Gobierno realizó una contratación directa por 1,25 millón de pesos a la Asociación Civil de Estudios Superiores de la Universidad Austral para que realice un estudio preparatorio para las transferencias de los organismos nacionales con jurisdicción en materia civil y comercial de la Ciudad.

Entre esos organismos civiles y comerciales, los expertos identifican al Registro de la Propiedad Inmueble, los Registros del Automotor, el Puerto, y sin duda alguna, la Lotería Nacional, cuyas atribuciones no tiene sentido que sean federales, según señalan en el PRO.

En el Ejecutivo aseguran que el objetivo es recuperar el control y la la fiscalización que Cristóbal evita desde hace años mediante recursos de amparo, pese a un fallo histórico de la Corte Suprema que autorizó al gobierno porteño en 2011 a que le cobre ingresos brutos por la explotación de las salas de juego de los casinos flotantes.

Sin embargo, nadie descarta que en diciembre Cristóbal López pueda ser el beneficiario de un nuevo convenio.

Con esta maniobra, Macri toma la iniciativa en dos frentes respecto de un tema que era acaparado por sus rivales. 

Por un lado, en relación a su competencia por la presidencia, puesto que Sergio Massa ordenó un proyecto para estatizar el juego en la provincia y había monopolizado la discusión. Por otro lado, a nivel local, una de las principales críticas de Martín Lousteau, el principal rival de Larreta en las generales del 5 de julio, era el convenio con Cristóbal López.