Entre Ríos

Productores de naranjas ahora piensan regalarlas a comedores comunitarios

La brecha entre lo que cobra el productor y lo que paga el consumidor es del 1900%. Ayer tiraron toneladas de fruta sobre la ruta 14.

La grave crisis que atraviesa el conjunto de las economías regionales está golpeando ferozmente a los cítricos. Ayer fue noticia que productores de Entre Ríos y Corrientes tiraron naranjas sobre la ruta 14 a modo de protesta por la falta de rentabilidad.

Pero lo cierto es que, según pudo averiguar La Política Online, no todos los productores de naranjas están de acuerdo con dicha modalidad de protesta dado que, al tirar la fruta al suelo, se pueden causar problemas sanitarios y hasta accidentes automovilísticos.

Por esto mismo, en diversas asambleas que se vienen realizando en ambas provincias los productores comenzaron a plantear un nuevo modo de protesta que consiste en dirigirse hasta los principales comedores comunitarios y regalar las naranjas.

“Consideramos que donar naranjas a los más necesitados es una buena alternativa para poner en evidencia el reclamo de los productores”, comentó a LPO Pablo Vernengo, director ejecutivo de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

“Estamos tratando de poner cordura, pero hay mucha bronca de los productores”, señaló Vernengo, y agregó que “a nadie le gusta tirar a la ruta el trabajo de todo un año y más teniendo en cuenta que cuando la naranja revienta puede producir efectos no deseados”.

Así las cosas, el creciente malestar por parte de los naranjeros resulta más que lógico: según un estudio de la CAME, los productores cobran actualmente unos 50 centavos por kilo, al tiempo que en los supermercados el producto se vende a 10 pesos.

Es decir, en el caso de las naranjas, la brecha entre lo que cobra el productor y termina pagando el consumidor en los comercios llega al 1900 por ciento, superando inclusive a la manzana y el durazno, entre otros productos con amplias brechas.

“Evidentemente hay un problema en la cadena de valor porque no puede ser que en un pase de manos de 48 o 72 horas se incremente tanto el precio de un producto; los supermercados se quedan con la mayor parte”, denunció Vernengo.

En este contexto, ¿cuáles son las medidas que necesitaría el sector para revertir la actual situación? “Es necesario eliminar las retenciones, compensar las cargas sociales y el transporte según las distancias”, respondió el entrevistado.

“Muchos productores no están pudiendo cosechar porque trabajan a pérdida y algunos lamentablemente tuvieron que dejar de pagar las cargas sociales de los trabajadores entrando en deuda con el fisco”, alertó el director de CAME.

Cabe destacar que en la actividad citrícola el principal costo es el laboral dado que se necesita gran cantidad de mano de obra para encarar los trabajos de cosecha. “Nuestros costos subieron un 50% el último año y el precio apenas un 20%”, dijo Vernengo.

En tanto, otro aspecto que golpeó muy fuerte a la actividad citrícola es la devaluación del rublo en Rusia y del real en Brasil. “Los países importadores frenaron sus compras y pagan hasta un 70 por ciento menos que el año pasado”, concluyó.